Luis Rodero, presidente de la asociación provincial que agrupa a estas empresas, afirma que es "dar una patada hacia adelante ante la escasez de examinadores"
Esta semana, en concreto el miércoles, entre en vigor en Salamanca el nuevo sistema CAPA impuesto por la DGT para realizar los exámenes prácticos de conducción. De este modo, a cada autoescuela se le asignará un número de alumnos que pueden presentars a esta prueba en función de la cantidad de aptos en el examen teórico.
Para ello se tiene en cuenta los datos de los alumnos aptos en un trimestre en la primera convocatoria, que hayan aprobado a la primera el examen de coche, y se comparan con la media provincial de alumnos que aprueban a la primera. Así, se permite a cada centro de formación añadir más alumnos si superan la citada media provincial.
En caso contrario, las autoescuelas que no lleguen a esa cifra de referencia podrían ser penalizadas con la la reducción de su cupop de alumnos que se pueden presentar en una convocatoria de examen.
El presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Salamanca, Luis Rodero, considera que este cambio supone "dar una patada hacia adelante a la escasez de examinadores, que es el verdadero problema, de hecho, en las provincias donde ya se está aplicando ha provocado un retraso mayor en los exámenes".
"Es un problema histórico de la DGT y nosotros lo que pedimos es poder examinar con regularidad, ya que hay alumnos que necesitan el carné para trabajar y no pueden esperar meses para lograrlo", añade a SALAMANCA AL DÍA.
En la misma línea, Antonio Rollán, secretario de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Salamanca, que está integrada en la Confederación de Empresarios de Salamanca (CES), de la que es vicepresidente, asegura que estos nuevos límites al número de alumnos que podrá examinar cada escuela serán "nefastos" porque ralentizarán las pruebas y perjudicarán también a las autoescuelas que forman para la conducción de vehículos pesados, ya que este examen lleva más tiempo que habrá que restar del mismo cupo asignado. "Si hubiera suficientes examinadores, sería un buen sistema, ya que concreta las fechas exactas de las pruebas", concluía.
Por su parte, la DGT asegura que pretende reforzar el aprendizaje y no colapsar los exámenes prácticos de conducir con alumnos que se presentan varias veces. El objetivo es que se preparen de la mejor forma posible para el primer examen y que puedan superar la prueba a la primera.