En el caso de Castilla y León son 2.394.918 las personas inscritas, lo que supone un descenso del 0,19 por ciento y la pérdida de 4.630
Los datos definitivos del Padrón continuo a 1 de enero de 2020, publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), sitúa en 2.394.918 las personas inscritas en el padrón, frente a los 2.399.548 de la misma fecha un año antes, lo que supone un descenso del 0,19 por ciento y la pérdida de 4.630 inscritos en Castilla y León.
De los inscritos en el padrón, 2.253.761 son habitantes españoles y 141.157 extranjeros, y más de la mitad son mujeres (1.216.072) y 1.178.846 hombres.
Según los datos del INE consultados por Europa Press, el padrón continuo en 2010 llegó a los 2.559.515 inscritos, cifra que ha bajado de forma sucesiva hasta el del 1 de enero de 2020, con esos 2.394.918 lo que supone 164.597 menos en una década. La evolución es de 2.558.463 en 2011; 2.546.078 en 2012; 2.519.875 en 2013; 2.494.790 en 2014; 2.472.052 en 2015; 2.447.519 en 2016; 2.425.801 en 2017; 2.409.164 en 2018 y 2.399.548 en 2019.
Por provincias, Ávila tiene inscritos 157.664 habitantes, 24 más que en 2019 cuando alcanzó los 157.640. También ganan habitantes las provincias de Burgos que pasa de 356.958 de 2019 a 357.650 en 2020 (692 más); Segovia llega a los 153.478 frente a 153.129 en 2019 (349 más); Soria cuenta con 88.884 frente a 88.636 el año precedente (248 más) y Valladolid pasa de 519.546 a 520.649 (1.103 más).
El resto de las provincias pierden inscritos en el padrón continuo. Así, León pasa de 460.001 en 2019 a 456.439 en 2020 (3.562 menos); Palencia de 160.980 a 160.321 (659 menos); Salamanca de 330.119 a 329.245 (874 menos) y Zamora que se queda en 170.588 frente a los 172.539 de 2019 (1.951 menos).