El 80,5% de los fallecidos en la comunidad autónomas entre los meses de marzo y julio tenía más de 75 años, según el informe del Sistema MoMo
El Sistema de Monitorización de la Mortalidad (MoMo), que utiliza la información de mortalidad por todas las causas que se obtiene diariamente de 3.929 registros civiles informatizados del Ministerio de Justicia, refleja que Castilla y León tuvo del 18 de marzo al 14 de julio un exceso de mortalidad del 48,8%. Según el último informe publicado por el Instituto de Salud Carlos III, la comunidad registró durante este periodo 10.872 defunciones, 3.567 por encima de las esperadas.
Las personas mayores han sido las más golpeadas durante la crisis sanitaria del Covid-19, y así lo constatan las cifras. El 80,5% de los fallecidos en Castilla y León entre los meses de marzo y julio tenía más de 75 años, según el informe del Sistema MoMo publicado esta semana. Del total de defunciones observadas durante este periodo (10.872), 8.756 se produjeron entre personas mayores de 75 años, alcanzando el exceso de mortalidad registrado en esta franja de edad el 55,6%.
El exceso de mortalidad es de 1.775 mujeres (+50,4%) y de 1.932 hombres (+53,3%), mientras que por edades es de 3.127 personas entre los mayores de 74 años (+55,6%), de 334 en la franja de 65 a 74 años (+39,6%) y de 130 en las personas de hasta 65 años (+16%).
En el conjunto de España, la información aportada por los registros civiles señala que durante los meses de marzo y mayo, en el grueso de la pandemia, en España se han registrado 44.285 muertes más de las esperadas, lo que se traduce en un exceso de mortalidad del 57,9 % entre el 13 de marzo y el 22 de mayo, concentrado, sobre todo, en los mayores de 74 años (68 %), seguido de los que tienen entre de 65 a 74 años.