"Para afrontar la pandemia, las instituciones se han acordado del sectorpara trabajar, obviando la ayuda institucional para garantizar unas condiciones de trabajo seguras"
La Asociación de Empresarios Salmantinos de Transportes Discrecionales, AESTRADIS, organización integrada en CONFAES y miembro de la Federación de Empresas de Transporte de Mercancías por Carretera de Castilla y León (FETRACAL) considera que en las condiciones actuales del sector hay motivos más que "suficientes", "y necesarios", para secundar el paro empresarial convocado por el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC) y avalado por las organizaciones empresariales a las que pertenece Fetracal, como CETM y Conetrans, que será los días 27 y 28 de julio.
Por todo ello, los transportistas de mercancías de Castilla y León muestran su "descontento" con el trato recibido por el Gobierno durante los últimos años, en los que ni el ministro del ramo ha tenido una interlocución clara con el sector ni se han atendido las reivindicaciones que se consideran lógicas para resolver problemas estructurales, explica la Federación a través de un comunicado remitido a Europa Press.
Aunque Fetracal reconoce avances en las últimas semanas en las conversaciones con el Ministerio de Transporte, en la actualidad sigue sin producirse un respaldo concreto hacia el sector.
Al mismo tiempo, la patronal del transporte de mercancías por carretera de Castilla y León también es consciente de que, durante el estado de alarma, decretado para afrontar la pandemia, las instituciones se han acordado del transporte para trabajar, obviando tanto la ayuda institucional que necesitan las empresas del sector como su apoyo para garantizar unas condiciones de trabajo seguras para los conductores, añaden.
"Es más, el Gobierno anunció, dentro de su plan de apoyo al sector de la automoción, la aprobación de las 44 toneladas y los 4.5 de altura en mayo de 2021 en contra de lo defendido siempre por el sector y sin recabar su opinión", lamentan.
Además, Fetracal quiere mostrar su descontento con un segmento muy importante de cargadores, ya que durante el estado de alarma han maltratado a los conductores de camiones en numerosos centros de carga y descarga de las mercancías, donde se les ha negado hasta la posibilidad de acceder a los aseos y servicios más básicos. "Nos han obligado a realizar las labores de carga y descarga cuando no disponíamos de ningún tipo de protección con el consiguiente riesgo de contagio, obviando además la normativa en prevención de riesgos laborales", denuncian.
Y ha aumentado, a su juicio "indiscriminadamente", los tiempos de espera entre cargas y se negaron a compensarnos económicamente por la falta de viajes de retorno, denuncian.
Fetracal mantiene las reivindicaciones de confirmación de que no se producirá la ampliación de la Masa Máxima Autorizada (MMA) y la altura de los camiones hasta las 44 toneladas y los 4,5 metros, respectivamente, sin el consenso del sector; de que no se aplicará el pago por uso de infraestructuras (euroviñeta) sin el consenso del sector; la prohibición, salvo excepciones, de que los conductores realicen labores de carga y descarga; el cobro obligatorio de los servicios de transporte a 30 días; el pago inmediato de las cantidades adeudadas por el céntimo sanitario y la devolución mensual del gasóleo profesional.