Lo que no hay que hacer nunca es humedecerlas, porque se puede deteriorar el material con el que están hechas y pierden efectividad, y en caso de sudoración excesiva, mejor cambiar la mascarilla
Mascarilla y altas temperaturas pueden ser una incómoda combinación, pero la prevención del Covid-19 requiere que nos adaptemos y no cometamos algunos errores a la hora de utilizar las mascarillas para protegernos. La sensación de falta de aire que producen se debe a la falta de costumbre, su uso prolongado o su reutilización por encima de las indicaciones. Pese a esta sensación hay que evitar estar continuamente manipulando la mascarilla con las manos.
Hay algunas mascarillas que dan menos calor al ser más finas, pero también hay que subrayar que ninguna entraña riesgo de falta de oxígeno ya que todas las homologadas son transpirables. Lo que tampoco hay que hacer nunca es humedecerlas, porque se puede deteriorar el material con el que están hechas y pierden efectividad.
Estos son algunos consejos para hacer más llevadero el verano con mascarilla: