La CHD ha fijado la cantidad mínima de agua que deberán tener el 30 de septiembre tanto el pantano del Águeda como la presa de Irueña
Después de mantener durante algo más de dos semanas una media de 13 metros cúbicos por segundo, el caudal del río Águeda ha sufrido desde primera hora dela mañana del martes un brusco bajón del pantano hacia abajo, al reducirse precisamente el ritmo de desembalse de ese lugar.
En concreto, a las 7.00 horas de la mañana el pantano del Águeda pasó de desembalsar 11,5 metros cúbicos por segundo a poco más de 2,5 metros cúbicos por segundo. En lo que se refiere al paso del Águeda por Ciudad Rodrigo, la bajada del caudal se empezó a notar a partir de las 11.00 horas, de tal modo que a las 14.00 horas ya bajaba solo con un caudal de 7 metros cúbicos por segundo.
La intención es que el caudal acabe llegando también Miróbriga a unos 2 metros cúbicos por segundo, con la finalidad de que el Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo pueda montar la pasarela que desde el año pasado se instala en los pontones que conectan la zona del Camping Municipal con el camino que lleva a la isla de El Picón.
Según explicó a primera hora de la mañana del martes el concejal de Río del Ayuntamiento, José Manuel Jerez, la Confederación Hidrográfica del Duero ha aceptado que el caudal baje a 2 m3/s durante las jornadas del martes y el miércoles para permitir ese montaje, pero como el descenso del caudal no fue tan repentino en Miróbriga, no pudieron iniciarse los trabajos durante la mañana del martes.
Asimismo, José Manuel Jerez señaló que durante el verano el caudal del río bajará a su paso por Ciudad Rodrigo a unos 5 metros cúbicos por segundo, en la línea de los últimos veranos, salvo alguna excepción como en 2018, cuando bajó con mayor intensidad para desalojar un mayor volumen de agua de Irueña para que la presa estuviese preparada para el siguiente otoño-invierno.
Precisamente, en la misma mañana del martes la Confederación Hidrográfica del Duero dio a conocer los volúmenes mínimos de reserva que deberán tener los embalses de la Cuenca del Duero el 30 de septiembre, cuando concluya la campaña de riego. Esos volúmenes -que han sido acordados por la Comisión de Desembalse de la Cuenca- son de 15 hectómetros cúbicos para el pantano del Águeda, y de 40 hectómetros cúbicos para la presa de Irueña.
En estos momentos, el pantano tiene poco más de 20 hectómetros cúbicos acumulados (ha aumentado en las últimas horas al reducirse el ritmo de desembalse), e Irueña, 73 hectómetros cúbicos acumulados (viene desembalsando a un ritmo constante desde el 4 de mayo, cuando acumulaba 99 hectómetros cúbicos). Hay que apuntar que los volúmenes establecidos por la Comisión de Desembalse para este 2020 son superiores a los del año pasado, cuando se estableció un mínimo de 6 hectómetros para el pantano del Águeda y de 30 para la presa de Irueña.