Los niños pueden responder a una situación difícil o inquietante aferrándose a sus padres o cuidadores, sintiéndose ansiosos, retraídos, enfadados o agitados
La pandemia del Covid-19 y el confinamiento que estamos sufriendo pueden tener múltiples efectos en la salud mental de los niños y de las familias. Con el fin de reducir este impacto, Aldeas Infantiles SOS ha elaborado una guía con consejos prácticos para ayudar a las familias a lidiar con su estrés y el de los más pequeños.
Los niños pueden responder a una situación difícil o inquietante de diferentes maneras: aferrándose a sus padres o cuidadores, sintiéndose ansiosos, retraídos, enfadados o agitados, teniendo pesadillas, orinándose en la cama o manifestando cambios frecuentes de humor, entre otros.
Para ayudar a los más pequeños a lidiar con el estrés durante el confinamiento, estos son algunos consejos:
- Fomentar la escucha activa y una actitud de comprensión hacia ellos.
- Crear un entorno más sensible y afectuoso que de costumbre a su alrededor.
- Ayudarles a encontrar formas positivas de expresar sentimientos que les
inquieten, como la ira, el miedo y la tristeza. - Contarles lo que está sucediendo, dándoles información clara y adaptada a su edad sobre cómo reducir el riesgo de infección y permanecer seguros.
- Mantener las rutinas y los horarios regulares o crear otros nuevos que incluyan el aprendizaje, el juego, el ejercicio físico y la relajación.
- Siempre que sea seguro para ellos, garantizar que los niños están cerca de sus padres y familiares.
- Si están separados de sus padres o cuidadores habituales, asegurar un contacto regular y frecuente con ellos que les aporte confianza y seguridad.
- Tal y como explican desde Aldeas Infantiles, el confinamiento puede tener en la población a corto y largo plazo. Así, es normal sentirse triste, angustiado, preocupado, confundido, asustado o enfadado durante una crisis; y que mantener la calma, organizar una rutina diaria y tratar de mantenerse positivos es clave para proteger la salud física y mental y para conseguir aceptar nuestras emociones y controlarlas.