Al tiempo que atravieso los espacios, tengo la sensación de penetrar en una galería de silencios donde eclosionan mis facultades extrasensoriales. Otro mundo despierta en mi interior y me enseña lo que el ojo no puede ver y la palabra es incapaz de expresar. Es como si viviera una segunda vida en la que se va tejiendo, con la cadencia necesaria, otra realidad que me ayuda a crecer en lo fundamental.
Manuel Lamas