Evitar el tabaquismo y mejorar la calidad del aire que respiramos son dos de las claves para frenar estas patologías
Las enfermedades más frecuentes del sistema respiratorio son EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), asma, infecciones respiratorias agudas (neumonía, bronquitis), apnea obstructiva del sueño, cáncer de pulmón y patología pulmonar intersticial.
La prevención es clave para frenar las enfermedades respiratorias. Y entre las medidas para reducir los riesgos de padecerlas, hay dos que son fundamentales: evitar el tabaquismo y reducir la contaminación para mejorar la calidad del aire, tanto exterior como interior. A estas, la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) añade varias medidas más que dependen directamente de la práctica médica y asistencial, como por ejemplo la vacunación antigripal o antineumocócica o la práctica habitual de ejercicio físico".
En cuanto la contaminación, se sabe que es la causa del desarrollo o empeoramiento de enfermedades respiratorias como el cáncer de pulmón, las neumonías, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica o el asma, de infecciones respiratorias agudas y de otros muchos efectos dañinos para la salud. Sin embargo, el 35% de la población española respira aire contaminado, según datos de los expertos.
En el caso del cáncer de pulmón -enfermedad con una alta mortalidad, aunque su diagnóstico precoz puede reducirla y mejorar las tasas de supervivencia-, los profesionales sanitarios demandan la implantación de programas de cribado en cáncer de pulmón.
Hábitos saludables para prevenir enfermedades respiratorias
En este Día Mundial del Pulmón, iniciativa del Foro de Sociedades Internacionales Respiratorias, tomamos nota de lo que está en nuestras manos hacer para prevenir estas patologías.