El Manzano
Ha sido tradicional en España, y en toda la cuenca mediterránea, el pastoreo integrado con actividades agrícolas y forestales, es decir, el pastoreo del ganado sobre erial, baldío, montes leñosos y huecos, rastrojeras, barbechos, etc. Esta integración ha permitido un mayor uso agrario del terreno, creando una compleja diversidad de áreas de aprovechamiento ganadero. La superficie pastable total de España ascendía a comienzos de los años noventa a 23.079.800 ha., incluyendo prados naturales, pastizales, eriales a pastos, barbechos y montes huecos y leñosos. Esta cifra representa, aproximadamente, el 45 % de la superficie geográfica total. Se ha prescindido de las rastrojeras pastadas debido a que su capacidad de sostenimiento ganadero es mínima, así como bastante variable y difícil de establecer; y de igual forma, habría que restar lo no pastable de pastizales, eriales, etc.