OPINIóN
Actualizado 19/07/2019
Fructuoso Mangas

Se acaba de celebrar la primera sesión de las Cortes de Castilla y León y confieso la buena impresión que me transmite el nuevo portavoz. Sin embargo en su información me han saltado varias alarmas. Y aquí destaco estas dos, aunque me falte en estos momentos más información: una, que el principal partido ha propuesto, impuesto quiero decir, para senador castellanoleonés en Madrid a alguien que no es ni vecino ni natural ni nada que se sepa de esta autonomía, tan alavés él y tan buen alcalde de Vitoria durante años, y parece, es un decir, que por imposición del partido desde Génova. ¿No hay en esta tan extensa Autonomía alguien que nos pueda representar? El impuesto por Madrid será sólo presentante pero no re-presentante, porque no nos puede re-presentar, solamente podrá presentar en Madrid nuestras propuestas. Lo que siento es que algo nos falta o nos sobra. Y en todo caso, pobre partido privado de personas posibles, prudentes y poderosas para poder presentar nuestros propios problemas y promover nuestras propias propuestas? Pido perdón para los presundos petardos populares.

Sí, es como de risa. Lo que no es de risa es esta Autonomía mendicante y vaciada, hasta de re-presentante, que nos van des-haciendo

La segunda alarma es que parece que van a rebajar la fiscalidad que gestiona la Autonomía; no hay explicaciones suficientes, pero no bastaría con rebajarla, sino redistribuirla con más justicia y proporcionalidad. Esperemos, aunque me temo que en esto como tantas veces los que hacen las leyes y decretan las normas olvidan no poco a los pobres y bastante a la clase media. Por cierto me gusta imaginarme que la mayoría de los representantes en las cortes provienen de clases bajas y medias. Lo supongo, quizás porque lo deseo. A lo mejor eso ayudaría a que la nueva fiscalidad favoreciera sobre todo a esos dos grupos sociales.

Y la tercera alarma viene desde otras declaraciones. Dice alguien del Ayuntamiento de Salamanca que no hay comedores escolares este verano para no crear discriminaciones. No he encontrado mayores aclaraciones, pero esa no puede ser la razón real, porque si hay necesidad de comedores para algunas/pocas/muchas (da igual) familias, debe haber comedores antes que piscinas. Y si no hay necesidad, pues no hay comedores, pero porque no hay necesidad no porque se quiera evitar la discriminación. La peor discriminación, y consentida, es que haya familias pobres que no puedan cubrir una comida normal a los más pequeños. Esto sí que es una DISCRIMINACIÓN MAYÚSCULA, hasta en el tipo de letra. No me acabo de creer que esta información, pescada de oído, sea verdadera, por la gruesa hipocresía que esconde, prefiero que sea falsa. Mañana lo vemos.

Leer comentarios
  1. >SALAMANCArtv AL DÍA - Noticias de Salamanca
  2. >Opinión
  3. >Tres alarmas