Javier Castaño: “Me siento muy identificado con la afición de Pamplona”

Javier Castaño hace el paseíllo este martes en la plaza de toros de Pamplona, una feria de gran repercusión y en la que el salmantino es fijo desde el año 2012 (solo ha fallado en una ocasión). Tras la cogida sufrida el año pasado en la Feria de San Fermín por un toro de José Escolar, el diestro repite con la misma ganadería y también con la misma ilusión con la que cada temporada acude a Pamplona. Estará acompañado por Fernando Robleño y Pepe Moral.

"Voy con la ilusión lógica de torear en una gran feria como es la de San Fermín y siendo consciente de todo lo que conlleva torear en Pamplona", asegura Javier Castaño. "Desde 2012 solo he fallado un año en la feria y el balance de mi paso por esta plaza es muy positivo, siempre he matado la corrida de Miura y estos dos últimos años la de José Escolar, he cortado orejas y dado vueltas al ruedo, y me siento muy identificado con esta afición, a la vez que agradecido", explica.

El salmantino tiene fe en el encierro de José Escolar y reconoce que cornada que le propinó el año pasado un toro de esta divisa está completamente olvidada. "Espero tener suerte y que el lote acompañe un poco para que me permita profundizar en mi toreo y que la afición vea la progresión", afirma.

A pesar de que la de Pamplona será la segunda corrida de toros de esta temporada, asegura que los escasos paseíllos de este año no son impedimento para alcanzar el triunfo deseado porque "son muchos años de alternativa y la madurez y el oficio están ahí, como también está intacta la ilusión", destaca el torero. "Esperemos que la moneda caiga en esta ocasión boca arriba", indica, y con poco que ayude la corrida se podrá ver la mejor versión de Javier Castaño.

Tras Pamplona le espera otra cita importante. Será el próximo 13 de julio en la localidad francesa de Ceret, donde compartirá cartel con Iván Vicente y Joselillo y lidiará un encierro de la ganadería salmantina de Juan Luis Fraile.