La ganadería extensiva constituye un aprovechamiento ganadero claramente diferenciado de aquel otro basado en la intensificación de las producciones y desvinculado de bases territoriales concretas.
Tradicional actividad económica en numerosas zonas españolas, en la actualidad padece una profunda crisis como consecuencia de la competencia planteada por la ganadería intensiva y la falta de capacidad de respuesta por parte de unos sistemas poco evolucionados y escasamente relacionados con circuitos comerciales de suficiente amplitud.
Las salidas han sido diversas y los resultados no siempre positivos. Es necesaria la potenciación de la ganadería extensiva con medidas diversas desde la Administración, posible en un momento en que se han alcanzado óptimos niveles productivos y podía ser interesante la oferta de producciones de elevada calidad procedentes de la ganadería extensiva, ligada directamente a territorios concretos y a la utilización de unos ecosistemas de considerables potencialidades.