OPINIóN
Actualizado 05/04/2019
Teresa Marcos Domínguez
Fantasía y vanidad
eso 1o quiero dejar;
yo sólo quiero aprender,
a pesar... de que ya se
lo que la vida nos da.
Seguiré por el sendero
o camino de la vida,
y aunque tropiece en el tiempo;
pero siempre por la orilla
yo pienso, que he de llegar.
Y llegar hasta el final
y sin ningún retroceso;
y aunque, alguna vez cayendo
me volveré a levantar; por eso
que, ya se, lo que la vida nos da.
No quiero ser invadida
de la maldita codicia;
¿para qué tanto egoísmo?
¿para qué tanta avaricia?,
con menos nos bastará..
¡Para qué queremos más;
si los cuidados afligen!,
y el sueño desaparece
sin poderle conciliar;
para qué... queremos más.
Me gusta el tiempo,
si de é1, el empleo es bueno
y se hace con anhelo
de adonde sale el provecho, si el
trabajo se concentra en su labor.
II
tilo_texto">Yo lo que siempre prefiero;
la belleza natural,
una criatura bella...,
sea persona o animal, y la
asombrosa palmera,
aunque sea vegetal.
Hay muchas bellezas más,
el arco iris la tiene
en los astros las estrellas,
las auroras y la Luna...
La antorcha siendo tan bella
no se puede comparar.
El fondo del mar contiene,
gran belleza natural.
Y los arrecifes son...
de estructura sin igual;
allí se encuentra, entre todo
una enorme variedad.
Si de corales, se trata;
los hay que parecen flor
y los hay que parecen rosa,
otros parecen ser hongos,
¡y hasta un cerebro... parece
que hayan cogido otros!
Entre el cielo y el mar
tan bella es la Tierra,
en que el aire invisible
entre el cielo y ella;
Ias magníficas aves, fieles, y
constantes, por el espacio penetran.
Del libro 'La llave del silencio'
Teresa Marcos Domínguez
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