El Gobierno da un plazo de uno a tres años para que las empresas, en función del número de empleados, apliquen un plan de igualdad
El Consejo de Ministros ha aprobado un nuevo marco jurídico que da un paso más hacia la plena igualdad con la reforma del Estatuto de los trabajadores. El objetivo es reforzar la igualdad de remuneración entre hombres y mujeres, sin discriminación. El Real Decreto-ley establece que las empresas de más de 50 trabajadores tendrá que llevar un registro con los salarios de hombres y mujeres, al que podrán acceder los trabajadores a través de su representación sindical o del delegado de personal.
Además, se plantea la modificación de la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres, en relación a los planes de igualdad en las empresas. El Real Decreto-ley establece un plazo de tres años para que las empresas de más de 50 trabajadores elaboren y apliquen un plan de igualdad, dos años para las de 100 a 150 y un año para las de 150 a 250. Hasta ahora solo era obligatorio para empresas con más de 250 trabajadores. Por otro lado, las empresas están obligadas a inscribir dicho plan en el Registro de planes de igualdad de las empresas, que se desarrollará reglamentariamente.
Se introduce así en el ordenamiento el concepto de 'trabajo de igual valor', es decir, cuando la naturaleza de las funciones o tareas efectivamente encomendadas, las condiciones educativas, profesionales o de formación exigidas para su ejercicio, los factores estrictamente relacionados con su desempeño y las condiciones laborales en las que dichas actividades se llevan a cabo en realidad sean equivalentes.