Tras la condena a España por el Comité de los Derechos del Niño, asegura que habrá otras tres sentencias próximas en la misma línea, "por devoluciones en caliente y malos tratos a inmigrantes"
José Palazón, presidente de Prodein (Asociación Pro Derechos de la Infancia) en Melilla, fotógrafo y activista pro derechos humanos, ha impartido una conferencia dentro del ciclo charlas 'Palabras que mueven' en la facultad de Geografía e Historia. Profundo conocedor de la situación en la frontera sur, Palazón ha explicado la situación actual que se vive en Ceuta y Melilla, dos ciudades "muy distintas y separadas por 500 kilómetros".
Palazón destacó la reciente condena a España realizada por el Comité de los Derechos del Niño por la expulsión en caliente de menores en Melilla, sin identificarlos, ni darles asistencia, una condena que calificó de "importante y nos anima mucho", que viene a confirmar la denuncia de todos los colectivos y personas que allí luchan por la defensa de los derechos humanos. Con esta condena, afirmó, se ha demostrado que "nosotros no hacíamos nada raro y que ellos (en alusión al Ministerio de Interior del PP) son la mafia".
Recordó que las devoluciones en caliente son una norma de trabajo "habitual" en Melilla, aplicándose durante el Gobierno anterior del PP, con violaciones de los derechos humanos "que se siguen produciendo". Sin embargo, Palazón está convencido de que a esta condena le seguirán otras porque el Tribunal Europeo de Derechos Humanos también está en esta línea de condenar a España por las devoluciones y los malos tratos a inmigrantes "y habrá tres sentencias próximas que condenarán a España".
Para el presidente de Prodein, hay que dejar de realizar "las prácticas mafiosas", recordando la lucha que desde la asociación se realiza, tanto en Ceuta como en Melilla, para rechazar cualquier método lesivo como las concertinas, vallas o el blindaje de los puertos "y que los niños tengan una atención distinta". En este sentido, se ha mostrado muy crítico con la propuesta del PP para cerrar hasta 27 centros de menores en Vizcaya "y evitar el efector llamada", lamentando que para algunos políticos "hay otras cosas que son preferentes frente a la educación y a la asistencia a niños". Para Palazón "nada es preferente a la atención a la infancia y a la vida" y afirmó que hay motivos para seguir luchando porque la situación "no está mejorando, va a peor, pero hay que pelear".
Palazón, desde los años 90, ha dedicado una gran parte de su tiempo en ayudar a los menores indocumentados, inmigrantes y mujeres maltratadas con reconocimientos como el Premio Ortega y Gasset de periodismo o, recientemente, el René Cassin de DDHH.
Fotos: Elena López