Las protestas se realizaron en Salamanca, al igual que en las principales ciudades del país
AUPA (Autónomos Unidos Para Actuar) convocaba este viernes al colectivo de autónomos para salir a la calle en su primera concentración. En Salamanca se realizó en la Plaza de la Constitución, aunque después fueron hasta la Plaza Mayor.
A raíz de las continuas subidas de la cuota de autónomos, un pequeño grupo de cinco emprendedores decidieron crear un grupo en la red social de Facebook en el verano de 2017. Hace tan sólo unos meses se constituyeron como asociación y en la actualidad cuentan con más de 42.000 autónomos en sus plataformas.
La movilización, como aseguran desde AUPA, es fruto de "la indignación, el malestar y la asfixia sufrida como consecuencia del desamparo por parte de las administraciones y la sucesión de gobiernos que trata de entretenerlos pregonando unas mejoras que, lejos quedan de aliviar la situación de los 3.253.670 (dato del Ministerio de Trabajo de España en septiembre de 2018) de autónomos que existen en España".
Los autónomos del colectivo se muestran "cansados de ser la hucha del país y de ser obligados a pagar impuestos abusivos y condenados a tener unos derechos inexistentes que deja mucho que desear en un país que alardea de un estado de bienestar". Con esta convocatoria exigen ser escuchados y unen sus fuerzas en esta nueva asociación creada y gestionada por ellos mismos.
Su núcleo central (alrededor de unos 30 emprendedores) dedica parte de su tiempo a gestionar toda su plataforma de forma altruista y han conseguido movilizar a todo el país convocando reuniones en todas las provincias de España y preparando su primera e histórica movilización para "luchar por sus derechos y exigir una vida digna".
Reclaman "igualdad de derechos entre los trabajadores asalariados y autónomos", una de sus reivindicaciones entre las muchas que urgen ser revisadas.
Con su 'Se acabó, no somos trabajadores de segunda' saldrán a la calle con todas sus fuerzas y más unidos que nunca". Como símbolo los podremos ver con una soga de ahorcado a modo de lazo que, simula la situación de ahogo a la que les somete el gobierno.