En la fotografía en clave baja no existen tonos claros o en todo caso son blancos o grises muy claros que no tienen gran presencia en la escena. Todo es negro o gris muy oscuro. En la fotografía en color supondría unos colores oscuros y muy saturados. Las imágenes de clave baja se llenan de sombras y negros, y se utilizan para agregar tensión y suspenso dramático a la atmósfera de la fotografía. Las imágenes de clave baja a veces también prestan atención a las líneas y formas, y siendo tan llena áreas oscuras y color negro, la luz puede reflejarse fácilmente en estas líneas y formas realzándolas entre la oscuridad.
La clave baja es ideal para retratos, con lo que agregamos fuerza al rostro del sujeto, también resulta muy interesante en fotografía de desnudos no explícitos, resaltando las curvas y formas del cuerpo. Sin embargo, ambas técnicas tienen posibilidades infinitas, solo debemos experimentar.
A esta técnica es posible añadirle un virado. Por otra parte y del mismo modo que hemos comentado, es perfectamente posible explotar la clave baja o "Lowkey" refiriéndonos esta vez a fotografías con niveles extremadamente altos de negros.
En dichas fotografías, no existen tonos claros. En todo caso son blancos o grises claros de tal formar que no exista apenas presencia de los mismos en la escena.
En la fotografía de color supondría unos colores oscuros o muy saturados llenas de sombras y negros. Normalmente, se utilizan para añadir tensión y suspense o dramatismo y se presta atención a las líneas/formas en la medida en la que la luz se refleja en ellas realzándolas entre la oscuridad.
La clave baja tiene posibilidades infinitas.