Otra vez he tenido la suerte y el privilegio de asistir a una velada de Concierto3, esta vez en la bella Iglesia de San Juan de la Cruz, de Alba de Tormes. Fue la víspera de Nochevieja y de nuevo me encontré con ese trío de poetas-músicos, que siguen creciendo en nivel artístico y en generosidad, y con un público, más que atento, fascinado durante la hora y media de recital.
Una selección de las mejores poesías de nuestros mayores poetas, desde Fray Luis de León, Cervantes, San Juan de la Cruz, Santa Teresa?a Miguel Hernández, Lorca o Antonio Machado?, calmó la sed y el deseo de escucha de la belleza de las palabras y la sabiduría de los contenidos de nuestros grandes escritores. El placentero asombro del que escribe estas líneas, iba del disfrute de oyente de estas letras eternas con Música y voces a la altura de los poemas, a ser testigo de cómo las/los oyentes del recital estaban sumidos en un completo y receptivo silencio. La música y la poesía que Concierto3 nos regaló la tarde del último domingo del año, fue un banquete cultural para los habitantes de Alba que se acercaron al Convento de la Anunciación.
Fue también una prueba de que la mayoría de la gente que habita nuestros pueblos castellanos prefieren los "platos exquisitos" de nuestros mejores poetas y cantautores, a la bazofia ruidosa y vacía que diariamente las televisiones emiten y dañan nuestros oídos. También la comunidad de religiosas del Convento pudo disfrutar desde su retiro del bello concierto, presidido, nada más y nada menos, del sepulcro de la más grande escritora castellana de todos los tiempos, Santa Teresa de Jesús.
Pero el que la buena literatura, la buena música llegue al público general, depende desgraciadamente del talante o nivel del concejal de cultura del ayuntamiento o de la diputación correspondiente. No es que no existan en la actualidad buenos músicos, poetas o escritores en nuestras tierras: es que está en manos de funcionarios muchas veces mediocres o con poca cultura, la capacidad de darlos a conocer, de publicar sus obras, de organizar el evento.
Finalizo con tres preguntas que muestran con claridad este hecho: ¿ Por qué Concierto3 tiene que limitarse a actuar en el territorio salmantino, cuando podrían beneficiarse de su escucha cientos de pueblos y ciudades de toda Castilla y León?
¿Por qué un joven compositor madrileño (que conozco) tiene que buscar en Berlín el estreno de una ópera suya sobre una obra de García Lorca, en lugar de estrenarla en nuestra Patria?
¿Por qué el que escribe estas líneas lleva esperando más de medio año la respuesta de una Diputación castellana sobre publicar o no su novela histórica sobre un excepcional artista del siglo XVI español, cuya vida transcurrió en la ciudad de esa Diputación a la que tanto le cuesta contestar?
Menos mal que la tenacidad de la mayoría de los creadores, como Concierto3, es similar a la de aquellos exploradores y héroes que, ya hace siglos, descubrieron mundos nuevos.