Algunos profesores que no maestros quizá ya se estén frotando las manos con sus primeros suspensos de la primera evaluación.
Ya en un programa de radio nos criticaban porque decían que la labor del profesor era hacer justicia con los suspensos.
No hay excusa para no valorar la vida de los que tienes a tu cuidado y de su esfuerzo por aprender. La satisfacción del maestro debe estar en acompañar el proceso de aprendizaje y provocarlo. Debe ser artista, científico y currante.
La magia de admirar a cada alumno desde su integridad de persona y niño con historia familiar y con sentimiento.
El maestro no es juez, y a él se le examina por la ilusión, conocimiento y felicidad que genera en los alumnos.
Aprender a leer el mundo sin examen, aprender a mejorarlo .¿ Cuál es la nota de los adultos que gobiernan el mundo?.
Yo estoy encantado de estar en el lado de los "últimos". Aquellos a los que la vieja escuela rechaza. Nuestro examen de cada día es una partida contra nosotros mismos.
La materia es buscar una simbiosis afectiva, sumar experiencias positivas que nos devuelvan la Fe en nosotros mismos.
También examinan los padres, y sólo vemos las notas y los aparentes desprecios. Son muchas veces llamadas desesperadas hacia lo importante, el buen querer sin condiciones. No soy nada pastelero, y puede que mayoritariamente seamos química, pero desde los alimentos a las demás drogas adulteradas, debemos resistirnos y ayudar a protegerse a nuestros alumnos e hij@s de la tiranía del mercado, de las modas de belleza, poder, dinero, ideologías prostituidas y distintas formas de deshumanización de la escuela, la sanidad, etc.
Por algo la Navidad y el Mesías nos dicen que nació en un pesebre. Cómo nos han cambiado la historia.
La esperanza de un mundo mejor y más justo no me cabe duda que está más cerca de las periferias que de universidades y bancos.
La vida con menos máscaras y cómplices está por estos lares.
Por aquí siempre corre el viento, agitando los árboles para que caigan los frutos variados de una dieta muy mediterránea.
Menos exámenes y más imaginación, volver a empezar una y mil veces, volver a caer y levantarse de nuevo. Otro Máster de fin de semana, antes de otra Navidad no sé si más o menos en familia. ¿Otro examen?.