Promoverá la creación de empleo directo e indirecto e impulsará nuevos proyectos empresariales en el polígono agroalimentario
Se acerca el fin de 2018 y también los momentos finales de la obra de Cuperal. En los próximos meses la automatización de la fábrica empezará a tener el protagonismo en la obra. Atrás quedaron los primeros movimientos de tierra que saludamos con expectación.
En este momento gracias a la instalación de Cuperal, Vitigudino cuenta con un polígono agroalimentario urbanizado y con un acceso a punto de acondicionarse. Y ello en virtud de un acuerdo entre la Diputación de Salamanca y el Ayuntamiento de Vitigudino que es la conexión con la carretera de La Fuente de San Esteban.
A veces algunas empresas hacen de locomotora para el movimiento económico de las ubicaciones que eligen. Cuperal, esa empresa que nació en los años 80 del pasado siglo en el municipio, y que tras ser comprada por el empresario Narciso Crespo en 2014 está a punto de poner en marcha en Vitigudino una fábrica de última generación, parece que cumple la función de locomotora.
Moverá empleos directos pero también empleos indirectos ligados no solo a la fábrica sino también al polígono que estrenará. Es de esperar que tanto Cuperal como el nuevo polígono genere un efecto de empuje de la económica local y que Vitigudino vuelva a ser el verdadero centro económico de toda la comarca.
Cuperal despide el 2018 con la ilusión de que el empuje que Narciso Crespo da a esta empresa sirva para inspirar nuevas aventuras empresariales en esta comarca.
Control total del proceso
Todos los procesos de fabricación de la nueva planta de Cuperal están diseñados y orientados a obtener alimentos de forma segura para los animales, pero teniendo siempre presente que pasarán a formar parte de la Cadena Alimentaria Humana, por lo que han de estar diseñados y orientados al cumplimiento de todas y cada una de las normativas en vigor en esta materia, ya sean de ámbito regional, nacional o comunitario.
El proyecto contará con un sistema de Supervisión y Gestión con un elevado nivel de control sobre cada uno de los procesos y en su conjunto. Mediante sistemas de visualización y potentes equipos de control, se controlarán cada fase de cada proceso