El sindicato insta a la Junta de Castilla y León a pedir disculpas por los "graves perjuicios" causados
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) exige responsabilidades a Función Pública de la Junta, "por la deficiente gestión realizada a lo largo del proceso de oposiciones del personal de servicios, cuyo examen se hizo el 3 de junio; y por los graves perjuicios que tiene la anulación del examen para las casi 19.000 personas que se presentaron".
Por ello, este sindicato independiente espera que la Junta "pida perdón a los afectados, "que tanto esfuerzo personal y vital pusieron, en tiempo y en coste económico, para tratar de encontrar un empleo". Además, pide que se reúna la Comisión Paritaria para que consensue los temarios, los tipos de prueba o los tiempos en los procesos de oposiciones.
Así lo afirma el presidente del sector autonómico de Administración General de la Junta en CSIF Castilla y León (AGCyL), Mariano Prieto, que explica que "en la Comisión Paritaria, que es la reunión en las que se prepararan los procesos de oposiciones, ya advertimos en su día que los temarios tenían que tener unos requisitos y unos niveles más bajos, más acordes a la competencia funcional de esos puestos de trabajo, ya que son para el grupo V, el más bajo, para plazas como limpieza o camareros, con una exigencia de titulación mínima, de Graduado Escolar".
Ahora, "la Junta nos ha dado la razón al decidir repetir el examen para las 384 plazas convocadas para personal de servicios, argumentando que en la parte del test que debía ser de preguntas prácticas, acordes a las competencias de los puestos, un 30% de esas preguntas eran teóricas, de un nivel muy por encima de lo que requieren las cualificaciones de las plazas", continúa Mariano Prieto. "No se han corregido los exámenes, pero hubiera sido tremendo comprobar que no se hubieran cubierto ni la mitad de las plazas convocadas, por las exigencias de un examen, en el que algunas de las preguntas más parecían dirigidas a graduados universitarios", añade el responsable del sector de AGCyL, que también recuerda que plantearon que el número de plazas convocaran aumentaran a mil, dadas las necesidades y demanda de estas plazas.
"Como ya anunciamos y advertimos de manera pública", recalca CSIF, algunas preguntas que excedían claramente el nivel de cualificación exigido, y que estaban mal formuladas, provocaron la presentación de un aluvión de recursos, que finalmente ha terminado en la anulación del examen, por lo que se repetirá la prueba". CSIF advierte que la anulación también traerá nuevos problemas, porque los afectados acudirán a los juzgados por los perjuicios causados.
Mariano Prieto se pregunta que si "después de tantos años sin oferta de empleo público, la Junta va a seguir convocando oposiciones así, sin escuchar", y plantea la conveniencia que se reúna la Comisión Paritaria del convenio laboral y de la Mesa General de Negociación de Empleados Públicos, para consensuar y pactar unos temarios adecuados al nivel académico, los tipos de prueba y el tiempo para realizar el examen, para que lo ocurrido con las oposiciones del personal de servicio no se repita".