De una forma pedagógica y lúdica, mediante talleres de diversas artes y mucha animación, Bragança invita a sumergirse en los inicios del s. XIV, cuando los conflictos entre Portugal y Castilla la convirtieron en protagonista
Del 13 al 16 de agosto en la zona que rodea al Castillo de Bragança, en la ciudadela intramuros, se celebra un evento que ya es un clásico y, al mismo tiempo, ofrece novedades cada edición.
Recreando el final del reinado del monarca portugués D. Dinis y la subida al trono de su primogénito, Alfonso, como Alfonso IV de Portugal, se desarrollará toda una serie de actividades musicales, artesanales, teatrales y circenses. Con todo, uno de los objetivos de esta fiesta es el de combinar pedagogía con diversión, por ello, habrá talleres de tintado de telas y pergaminos, de iniciación a la esgrima, a la falconería y al adiestramiento de aves rapaces y torneos medievales. Todo, para mostrar la importancia de Bragança a comienzos del siglo XIV y su papel en la Historia común de los reinos vecinos de Portugal y Castilla.
En 1325 muere D. Dinis y es sucedido por su único hijo varón legítimo, Alfonso. Alfonso IV encuentra un reino pacificado, después de las luchas de poder que se habían sucedido entre los diferentes estamentos de la nobleza portuguesa y a las que consiguió poner fin su padre, focalizando los esfuerzos guerreros contra el enemigo musulmán de los reinos del Algarve. Una vez recuperado el suroeste peninsular para la causa cristiana, el reinado de D. Dinis fue relativamente pacífico y así lo encontró su sucesor, Afonso IV.
Isabel de Aragón, esposa de D. Dinis, llamada en Portugal la Reina Santa, pues ha pasado a la Historia como Santa Isabel de Portugal, convirtiéndose en una de las patronas del país, había querido que todos los hijos del rey, legítimos y bastardos, fueran educados en palacio. Siendo el bastardo ?después legitimado-, Afonso Sanches de Portugal, el favorito del rey D. Dinis, siempre despertó los celos de su hermanastro y sucesor. Una vez muerto D. Dinis, el heredero lo desterró a Castilla, después de despojarle de bienes, rentas y privilegios. Afonso Sanches, ofendido por el trato de su medio hermano y queriendo hacer valer sus privilegios como predilecto de su padre, inició una serie de conspiraciones tendentes a hacerse con el reino de Portugal. Consiguió el apoyo de algunos nobles castellanos y realizó varios intentos de invasión de las tierras vecinas, aunque siempre fracasó.
Uno de esos intentos sucedió en 1326, cuando las tropas castellanas de Afonso Sanches quisieron entrar en Bragança. La defensa que los brigantinos hicieron de la ciudad, convirtió la ofensiva en un intento fallido. Rememorando ese momento, que acabó con un tratado de paz entre los dos hermanos, se celebra ahora la Fiesta de la Historia de Bragança.
La Fiesta de la Historia es solo uno de los muchos aspectos lúdicos con que la ciudad de Bragança festeja a su patrona, Nossa Senhora das Graças, del 11 al 22 de agosto. Desde el punto de vista religioso, el momento más relevante será la misa que tendrá lugar en la Catedral de Bragança, seguida de solemne procesión por las calles de la localidad hasta la iglesia de Nª Sª das Graças, en la que participan miles de brigantinos y habitantes de pueblos del concejo; un gran desfile de arte sacro con más de cuarenta pasos, que salen ese día de su espacio habitual en iglesias y ermitas de todo el concejo y de su capital para procesionar en Bragança.
Las festividades en honor a la patrona pondrán fin a once días de fiesta con mucha animación. En la zona envolvente al Castillo con la Fiesta de la Historia, y en otros puntos de la ciudad con conciertos nocturnos y espectáculos piro-musicales.
La Fiesta de la Historia comieza cada día a las 12 h y anima la ciudad vieja hasta la medianoche. Hasta el jueves 16 de agosto. La entrada al recinto, así como la participación en los diferentes talleres, es gratuita.