El más que tradicional Concurso de Pinchos, una de las citas gastronómicas más llamativas y destacadas del año en Peñaranda y una de las más esperadas por vecinos y visitantes cada agosto, parece haber muerto, al menos por el momento, tras el plante que los hosteleros han dado a su planteamiento.
Una decisión que llega tras el silencio y la falta de dialogo entre la Hostelería, y más concretamente entre los establecimientos integrantes de la Asociación de Hosteleros de Peñaranda, quienes han guardado silencio ante las reiteradas peticiones que desde la directiva del colectivo se han venido haciendo a todos los socios, instándoles a llevar a cabo una reunión en la que plantear las bases del certamen y el desarrollo global del mismo. Una situación que se viene repitiendo desde hace meses, siempre obteniendo la callada por respuesta, lo que ha generado que finalmente se suspenda y tenga que retirarse de la programación oficial previa de las Ferias y Fiestas, quedando anulada su celebración al menos este año.
Iván Zurdo, Presidente en funciones de ASHOSPE tras la dimisión en octubre del pasado año del anterior responsable, José María Manzano, ha mostrado su especial malestar por la situ
ación generada y la falta de respuesta ante su insistencia para poder organizarse y tratar de sacar adelante esta importante cita, esperando que al menos la asociación pueda seguir adelante, buscando nuevas formas de actuación tras la situación generada, algo que pasaría de entrada por llevar a cabo un encuentro con todos los miembros del colectivo para rehacer sus bases, que se encuentran en mínimos desde hace 11 meses.
La de este año sería la edición número doce de este concurso que desde su origen ha buscado ser un gran escaparate del potencial del sector de la Hostelería y la gastronomía en Peñaranda, ofreciendo tapas de autor como protagonistas de un animado circuito de establecimientos, en el que además se ofrecía la posibilidad a los clientes de votar la mejor tapa o Bar y optar a premios. Una historia de éxitos que ya durante los últimos años se ha visto marcada por un descenso en el número de participantes debido, en gran medida, a diferencias internas entre los socios hosteleros, algo que ha desembocado en la desaparición de la cita en este año 2018, que puede quizás servir como punto y aparte para comenzar a rehacer estas jornadas culinarias en mayúsculas de la ciudad.