Río Tâmega a su paso por Amarante/ Rep.Gráf.: Raquel Martín-Garay
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PORTUGAL
Actualizado 21/07/2018
Raquel Martín-Garay

Parajes refrescantes donde evadirse de la rutina urbana y huir de las concurridas playas costeras, para reconectar con la Naturaleza

Desde el interior hasta el litoral, Portugal cuenta con cerca de 250 playas fluviales, algunas enclavadas en verdaderos tesoros naturales. Algunas de ellas son difíciles de encontrar, lo que las hace aún más atractivas. Solo el murmullo del agua corriendo entre las piedras y el viento soplando en las copas de los árboles quiebra el silencio de estos lugares. Otras, sin embargo, disponen de todo tipo de servicios pensando en nuestro confort y son accesibles para todos.

Estos son algunos de los criterios que tiene en cuenta ABAE, la Asociación de Banderas Azules de Europa, que este año ha reconocido 33 playas fluviales portuguesas con Bandera Azul, 16 de ellas en la región Centro del país. Por su parte, Quercus, la Asociación Nacional de Conservación de la Naturaleza, ha identificado una calidad excelente en las aguas de 39 de estas playas, denominándolas Playas Fluviales con Calidad Oro. De ellas, 21 están localizadas en la región Centro y 12 en la región Norte. Esto quiere decir que algunas de las mejores playas fluviales de Portugal se encuentran muy cerca de nosotros. ¿Vamos a perdérnoslas? ¡Vayamos a descubrirlas!

Disfrutar de estos enclaves nos permitirá, a la vez, adentrarnos en el Portugal rural, donde las costumbres aún son auténticas y la gastronomía sencilla y tradicional. Aquí, todavía una parte de la población vive de la tierra, arraigada a ella y conectada a lo más esencial.

De la Serra da Estrela al corazón de Portugal

La Sierra de La Estrella es la cuna de muchos ríos portugueses, ya que es la montaña más alta del Portugal continental (1.993 m). El Zêzere, el Mondego y otros riachuelos y arroyos nacen en sus cumbres y constituyen la gran reserva hídrica del centro del país.

Sus cursos atraviesan el corazón de Portugal hasta el océano, dejando a su paso, parajes evocadores de perfecta armonía natural entre la roca, el bosque y el agua.

El río Zêzere nace a 1.900 m. de altitud, en el llamado 'Cântaro Magro' y, hasta su desembocadura en el Tajo, a la altura de Constância, recorre 200 km. por un territorio sinuoso, encajonado entre montañas, a las que en Portugal llaman montañas atlánticas. A lo largo de su cuenca encontramos tres embalses. El particular hábitat que origina fue el motivo para crear la Gran Ruta del Zêzere, que se puede recorrer por el río o por senderos, a pie o en bicicleta.

El Zêzere atraviesa el corazón geográfico de Portugal, constituye una de las marcas de identidad del territorio donde se ubican las Aldeias do Xisto (Pueblos de Pizarra). Esta tierra es una de las zonas más singulares, en cuanto a belleza paisajística y arquitectónica, de Portugal. Aquí se ha cuidado con celo el desarrollo turístico, para conseguir que sea compatible con la idiosincrasia de estos recónditos pueblos.

Pero antes, en los parajes graníticos de las cumbres de la Serra da Estrela, encontramos alguna de las mejores playas fluviales del país. Sus aguas son puras, limpias y, por supuesto, muy frías. Como la Playa del Vale de Rossim, situada a 1437 m. de altitud, en el mayor valle glaciar de Europa, dentro del paraje conocido como Penhas Douradas, perteneciente a la Reserva Natural de la Serra da Estrela. Sus aguas están consideradas Calidad Oro.

En ella es posible practicar piragüismo o rappel. Aquí el paisaje es el típico de alta montaña. En sus alrededores encontramos alguno de los alojamientos turísticos más lujosos de la región, como un Eco Resort con tiendas de campaña al estilo mongol, llamadas yurts y dotadas de todas las comodidades, varios hoteles con encanto o una de las prestigiosas Pousadas de Portugal.

El río Zêzere, conforme sigue su curso, forma la Playa Fluvial de Valhelhas, perteneciente al pueblo que lleva su nombre, cerca de Manteigas. Esta playa se caracteriza por sus aguas tranquilas y cristalinas, clasificadas también como Calidad Oro. Es ésta una playa accesible y cuenta con todo tipo de infraestructuras, por lo que posee Bandera Azul, por décimo año consecutivo. Pero si hay algo que la distingue es ser el escenario de varios eventos musicales nocturnos a lo largo del verano.

En la parte suroeste del Parque Natural Serra da Estrela podemos disfrutar de la Playa Fluvial de Loriga, en territorio de Seia. Esta playa se encuentra en un pequeño valle glaciar, rodeada de rocas redondeadas por la fuerza del pertinaz arroyo Loriga. Por eso, sus aguas también son claras y refrescantes, formando multitud de pozas.

Lo más curioso de esta playa es que, siendo salvaje, es accesible para todos. Hay una rampa que da acceso al paraje desde el parking y otra mediante la cual podemos introducirnos en el río. En la temporada de baños, hay socorrista.

Es una de las playas reconocidas con Bandera Azul y Calidad Oro de sus aguas. A unos 2 km. se encuentra la localidad de Loriga, un pueblo de montaña donde probar el Bolo Preto de Loriga, un bizcocho oscuro, debido a la canela que lleva en gran cantidad.

En las sierras atlánticas

Situado entre el mar y las montañas, el distrito de Coímbra es atravesado por el río Mondego, que viene de las cumbres de la Serra da Estrela, a 1425 m. de altitud, y desemboca en el Atlántico en Figueira da Foz. El río Mondego corre hacia el norte en su primer tramo, pasando por tierras de Celorico da Beira, en el borde norte de la Estrella, dirigiéndose después al suroeste. Es el río más largo de los nacidos en Portugal, con 234 km.

Esta zona central del Portugal continental es abundante en montañas redondeadas de altitud media, -en torno a los 1.000 m.-, en vegetación y en ríos. Una vez que dejamos a nuestra espalda la sierra de la Estrela, el paisaje que se extiende a nuestra frente está plagado de pinos, no en vano esta región lleva el nombre de Pinar Interior.

El río Alva deja, a su paso por la localidad de São Sebastião da Feira, una larga playa rodeada de montañas y de arboleda. Aguas tranquilas donde descansar el cuerpo y el espíritu, con la contemplación del verdor que dan chopos y castaños. Una rueda que extrae agua del río para regadío, es el signo distintivo de esta playa.

Estamos en territorio de Oliveira do Hospital, en la parte más occidental de la Serra da Estrela, adentrándonos casi en el territorio mágico de las Aldeias do Xisto, verdadero corazón de Portugal. Muy cerca de aquí, encontramos otra playa fluvial de las mejores del país, la de Avô. También a tiro de piedra, el Puente de las Tres Entradas, único puente de tres brazos existente en Portugal, testigo de la desembocadura del río Alvôco en el Alva, ambos provenientes de las cumbres de la Estrella. También muy cerca, varias calzadas romanas y el pintoresco pueblo de Aldeia das Dez.

Seguimos el impulso curioso que nos lleva a adentrarnos en las Aldeias do Xisto, por angostas carreteras de montaña, acompañadas por ríos y arroyos, bosques y casas de pizarra camufladas en el paisaje. Así, llegamos a uno de los pueblos más curiosos de Portugal, que hay que visitar, al menos, una vez en la vida: Piódão.

Llegar hasta aquí no es fácil, hay que tener determinación. Una vez en él, no defrauda, todo nos asombrará. Los arroyos Égua y Chãs d´Égua forman la Playa Fluvial de Foz d´Égua, cercana a Piódão. Su corriente corta los oscuros bloques de pizarra, formando una presa donde la temperatura del agua también es cortante, tan fría como límpida. Clasificadas como Calidad Oro y con Bandera Azul.

Nos encontramos en la Serra do Açor, en cuya ladera sur se sitúa el pueblo, sobre un terreno abrupto, de ahí sus sinuosas callejuelas. El pueblo de Piódão está clasificado de Interés Público y cuenta con la protección de la red de Aldeias Históricas de Portugal, constituyendo una de las 12 que la componen.

Entre la Sierra de Malcata y la Meseta

La Serra da Malcata y la Serra das Mesas entroncan por el este con el Sistema Central español y por el oeste con la Sierra de la Estrella. Es el lugar de nacimiento del río Côa, símbolo de la identidad rayana y uno de los pocos ríos con trayectoria sur-norte, pues desemboca en el Duero, 130 km. al norte, en Foz Côa.

El valle del Côa es célebre por los grabados rupestres encontrados en él. Existe hoy la Gran Ruta del Valle del Côa, que transcurre desde el nacimiento del río, en Fóios, en la Serra das Mesas, hasta el Duero Superior.

En el paraje de Vale das Éguas, en Sabugal, el Côa forma una abundante playa. El ambiente rural y natural predomina, y a ambas orillas hay frondosas praderas donde pasta el ganado.

A pesar de lo bucólico del paisaje, la playa cuenta con el apoyo de todas las infraestructuras habituales, como bar, vestuarios y una piscina flotante para mayor seguridad dentro del río.

El río Côa siempre fue rico en truchas, aún hoy la trucha tiene un papel importante en la gastronomía de Sabugal y es muy demandada por los visitantes.

Sin salir de Sabugal, también podremos disfrutar de la Playa de la Devesa, la de Fóios y la de Rapoula do Côa.

Buscando el Norte

Partiendo de las Arribes del Duero, cruzamos el río y encontramos una playa con Bandera Azul y aguas clasificadas como Calidad Oro, ¡un verano más! Es la Playa da Congida, en Freixo de Espada à Cinta.

Con una piscina flotante dentro del río y todos los servicios, cuenta con merenderos, vestuarios, bar con terraza y, sobre todo, las Moradias do Douro, casas unifamiliares donde alojarnos al lado de esta larga playa. Todas estas características, además de la de ser una playa accesible, hacen que repita año tras año como una de las mejores playas del país.

También desde la Playa da Congida podremos coger el barco para realizar el crucero medioambiental hasta Mieza.

Siguiendo el Duero llegamos a la Playa da Foz do Sabor, en Torre de Moncorvo. El río Sabor desemboca aquí en el Duero, en esta zona con condiciones estupendas para la práctica de deportes náuticos, ya que dispone de embarcadero.

Al encuentro del océano

El río Vouga nace en la Serra da Lapa (Viseu) y corre hacia el oeste hasta desaguar en la ría de Aveiro. Algo antes de llegar allí, pasando por el concejo de Server do Vouga, da origen a varias zonas de playa, facilitadas por la existencia de la presa de Grela, construida para el aprovechamiento hidroeléctrico del río. El concejo de Server do Vouga ha devenido famoso estos últimos años por la identidad que ha creado con el arándano. Aquí se producen en gran cantidad, aunque en Portugal es un cultivo frecuente en muchas zonas, elaborando, además, todo tipo de productos a base de ellos, lo que ha hecho que se conozca a Server do Vouga como 'la capital del arándano'.

La Playa Fluvial Quinta do Barco está situada en la margen izquierda del Vouga a su paso por el pueblo de Paradela. Aquí hallaremos un auténtico vergel, justo antes de encontrar las tierras planas y pantanosas que se extienden al norte y al sur de la ría de Aveiro. Una frondosa arboleda rodea esta playa con todos los servicios, incluido el de socorrista, una estructura modular flotante, tobogán y piraguas para alquilar.

Playas Fluviales de Portugal

Banderas Azules

Calidad Oro

Norte

5

12

Centro

16

21

Lisboa/Tajo

8

4

Alentejo

4

1

Algarve

-

1

Estás só
e ao teu encontro vem
a grande ponte sobre o rio.
Olhas a água onde passam os barcos,
escura, densa, rumorosa
de lírios ou pássaros nocturnos.

[...]

Olhas a água, a ponte,
os candeeiros,
e outra vez a água;
a água;
água ou bosque;
sombra pura
nos grandes dias de verão.

Eugénio de Andrade, 'Um rio te espera' (2-5)

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