Jaime González, herido esta mañana en el encierro de San Fermín, ya está en planta tras la intervención y manda un mensaje de tranquilidad a familiares y amigos
"Me encuentro bien. Tenía una cornada pequeña y aún desconozco el alcance pero no tengo dolores y todo ha quedado en un susto". Con estas palabras, Jaime González, el salmantino herido este viernes en el encierro de San Fermín quiere tranquilizar a sus amigos y familiares.
Según sus declaraciones a SALAMANCArtv AL DÍA, todo pasó en cuestión de segundos y cuando quiso reaccionar ya estaba prendido por el toro. "Ayer corrí el encierro en ese mismo tramo y no vi que hubiera dificultad. Veía bien los toros y vi que había hueco para meterme, pero cuando quise darme cuenta estaba ya cogido", explica.
Para este joven, miembro de Juventud Taurina de Salamanca, era su cuarto encierro y su segundo año en Pamplona. Había ido a San Fermín con un grupo de amigos de Salamanca y todos están con él en la habitación arropándole. Aunque está estable y fuera de peligro, tendrá que permanecer unos días ingresado en el Complejo Hospitalario de Navarra.