Dice Grande-Marlaska, el nuevo Ministro de Interior, que quiere quitar las concertinas de la valla de Melilla. Para empezar, podrá quitar las de la valla española, pero es que hay doble valla, o sea que en la parte de Marruecos las concertinas seguirán por los siglos de los siglos.
Y eso, si al final este Gobierno las quita y no queda solo como un "gesto de buenas intenciones".
Ya está pasando con los náufragos del Acuarius. Desde el Gobierno se llegó a decir que le iban a dar el estatus de refugiados a todos, pero anoche ya oímos que no, que se les va a internar en CIEs, y ya si eso, ya tal.
Lo mismo con las leyes mordaza: al principio se iban a derogar enteras, luego, solo unos artículos y al final,? veremos en que queda.
Parecido con las pensiones. Nada más tomar posesión, ya dijo Pedro Sánchez que subida este año y el próximo sí, pero que no va a poder blindarlas con respecto al IPC.
Sabemos que no tiene mayoría suficiente en el Congreso, y que en el Senado menos aún, y sabemos que tiene que hacer muchos gestos de cara a la galería, si quiere remontar los malos resultados electorales que venían augurando todas las encuestas; lo que no sabemos es si realmente tiene la voluntad política de cambiar de verdad las cosas.
De momento, han reaccionado muy rápidamente con el Ministro que utilizó la ingeniería fiscal en beneficio propio, cosa de agradecer después de lo que llevamos visto. Y con el feminismo también están cumpliendo con creces: el Gobierno ni siquiera es paritario, sino que las féminas son mayoría, y ¡qué mayoría!, ninguna está ahí para "cumplir con las cuotas", sino que tienen una trayectoria profesional que las avala sobradamente.
Así que por ahora toca darles un voto de confianza, esperemos que no se quede todo en "gestos" y se vayan concretando las mejoras que este país necesita