Ambas organizaciones reivindican mejoras salariales y una protección mayor para los desempleados
CCOO Salamanca afirma que el paro de mayo deja buenos números, tanto en cotizaciones como en desempleo, "pero con la permanente baja calidad del empleo que se ha creado y una permanente desprotección social".
En este sentido, desde el sindicato recuerdan que "respecto a las prestaciones, se mantiene la pobreza estructural de las personas desempleadas. De las 23.811 personas que siguen en desempleo, cobran algún tipo de ingreso 11.202, quedando 12.609 si recibir ninguna prestación o subsidio, un 52.95%".
En la misma lína, UGT Salamanca que "la estacionalidad genera 763 parados menos con más empleo precario y de los cuales tan solo el 31% son mujeres".
"Exigimos el reparto de la riqueza que se está generando a través de la mejora de los salarios". Del mismo modo, reivindican la negociación colectiva y una mayor protección de los desempleados. "Sólo así se incrementara el consumo y el empleo", concluyen (ver comunicado de UGT Salamanca en documento adjunto).
Comunicado de CCOO Salamanca
Cómo nos ha tenido acostumbrados en los últimos meses, el partido popular se despide del gobierno del país, con buenos números, tanto en cotizaciones como en desempleo, pero con la permanente baja calidad del empleo que se ha creado y una permanente desprotección social.
Importante incremento de las cotizaciones, 1.110 más que en el mes anterior y significativa bajada de personas desempleadas, 763 menos.
Por sectores, desciende el número de personas desempleadas en los cuatro sectores de producción, 25 menos en Agricultura, 73 menos en Industria, 193 menos en Construcción y 435 en Servicios.
La tónica general de siempre en nuestra provincia, sea cual sea la época del año, continua colocando al Sector de Servicios en la cabeza de la recuperación en las contrataciones, pero no ha así en la calidad del trabajo que se genera.
En este punto, volvemos a comprobar cómo el desempleo ha bajado más entre hombres que entre mujeres. 526 hombres y 237 mujeres menos en paro.
Importante ha sido también el número de contratos que se han realizado durante el pasado mes de mayo en Salamanca, en total se han realizado 11.452 contrataciones, 2.353 más que en el mes de abril.
Sin embargo, aparecen las sombras, la temporalidad ha marcado el 91.2% de estos contratos frente al 8.8% de contratos indefinidos.
Sí que es cierto, que en este mes, un 9.62% de los contratos han terminado siendo altas en la seguridad social, importante incremento con respecto al mes anterior que fue de un 3.49%.
Respecto a las prestaciones, se mantiene la pobreza estructural de las personas desempleadas. De las 23.811 personas que siguen en desempleo, cobran algún tipo de ingreso 11.202, quedando 12.609 si recibir ninguna prestación o subsidio, un 52.95%.
De quienes sí que perciben algún ingreso, el 39.39% perciben prestaciones contributivas, frente al 60.61% que siguen estando subsidiadas.
En definitiva, con leves atisbos de mejoría, más de lo mismo, sobre todo en cuanto a la calidad del empleo que se genera.
Se cierra una etapa oscura para las personas que más perjudicadas han terminado resultando de la crisis que ha durado casi 10 años en nuestro país, con demasiado desempleo estructural, con demasiada pobreza entre los colectivos más débiles, con muy malas condiciones de trabajo para las mujeres y los más jóvenes y con pocas expectativas de cambio, por lo menos hasta el pasado viernes, 1 de junio.
Ha llegado el momento de aprovechar el tiempo de forma urgente y fijar, ante el nuevo gobierno las prioridades políticas y de la agenda social, hasta que se produzcan unas nuevas elecciones.
En este sentido, saludamos los compromisos del nuevo presidente de avanzar una Ley de Igualdad Salarial para combatir la brecha de género, una apuesta política y presupuestaria contra las violencias machistas, la reactivación del Diálogo Social, un pacto de rentas con subidas salariales que recojan las propuestas realizadas por CCOO, la definitiva universalización de la Sanidad, la recuperación de la Educación pública y laica, un sistema de blindaje de nuestro sistema público de pensiones y en resumen, cambiar las políticas sociales y laborales, que devuelvan los derechos perdidos a la clase trabajadora y, de una vez por todas, se proteja a las personas más débiles y más perjudicadas en todos estos años.
Ha llegado el momento de comprobar si la clase polñítica de nuestro país está a la altura suficiente para demostrarnos que sabe usar las herramientas de un estado democrático y de diálogo, que no sea simplemente el ejercer el derecho a voto cada cuatro años.
Ha llegado la oportunidad para las clases sociales más débiles, para conseguir un nuevo Estatuto de los Trabajadores y para crecer en protección social y en igualdad real.
Con reservas, cautelas y sin triunfalismos, desde CCOO valoramos como esperanzador el cambio de gobierno en nuestro país.