OPINIóN
Actualizado 08/04/2018
José Antonio Mirón

Ayer se celebró el Día Mundial de la Salud para sensibilizar sobre la necesidad de una Cobertura Sanitaria Universal para Todas las Personas y en Todos los lugares. La Organización Mundial de la Salud quiere llamar la atención sobre la situación de falta de asistencia y de servicios sanitarios en muchas partes del mundo y, por considera que la Cobertura Sanitaria Universal (CSU) es esencial para la Salud y el Bienestar de las personas y los pueblos. También por hacer llagar a los gobernantes que es un objetivo viable y, prioritario el que nadie tenga que elegir entre una buena Salud o cubrir otras necesidades diarias.

Afortunadamente en nuestro país existe desde hace años dicha CSU, si exceptuamos a los residentes ilegales; aunque éstos tienen asegurada la asistencia si tienen una urgencia y/o son niños o embarazadas porque nuestro Sistema Nacional de la Salud (SNS) está concebido como un sistema social que sostiene y trata de mantener, junto a la Educación y la Seguridad Social, el Estado del Bienestar. También, la ética profesional que se enseña a los médicos y sanitarios orienta sus valores y competencias profesionales y, por tanto, no debe existir falta de asistencia a las personas que la necesitan. Además, nuestro sistema sanitario presenta varias de las características principales para hacer efectiva la CSU como son la accesibilidad y la gratuidad general de las prestaciones, salvo la colaboración que existe en el copago de los medicamentos. Componentes que permite a los grupos poblacionales desfavorecidos y con problemas económicos acceder a la asistencia sin tener que desembolsar un dinero que les haría pasar dificultades económicas. Esto no significa que el SNS sea gratuito, dado que se costea mediante las cotizaciones a la Seguridad Social por parte de los trabajadores y las empresas y, con impuestos directos e indirectos. Es decir, es gratis casi total en base al compromiso social y la solidaridad de los ciudadanos que cumplen con la fiscalidad anual y otros impuestos como el IVA.

Estas características son unas de las grandes fortalezas de nuestro gran sistema sanitario; pero no estaría demás dejar de retrasar decisiones para ponerlo al día en relación con la necesidad de una Atención Integral, interdisciplinar y de calidad que necesitan determinados grupos poblacionales como son las Personas Mayores que generalmente son enfermos crónicos y, muchos de ellos pluripatológicos que tienen problemas asistenciales complejos por sus características de fragilidad y/o dependencia y, por tanto, necesidades sanitarias y sociales. Retrasar la toma de decisiones por no asumir la situación del envejecimiento y la cronicidad está haciendo que la situación del SNS se esté deteriorando poco a poco; pero cada vez es más evidente y, se está creando un clima de insatisfacción en las pacientes y sus familiares e impotencia en los profesionales.

Soy consciente que la atención asistencial que necesitan estos pacientes es muy compleja por ser necesaria una atención simultánea y sinérgica del pilar sanitario (SNS) y del pilar social, los dos son importantes para aportar una Atención Integral Biopsicosocial con Continuidad para evitar recaídas y reiteradas urgencias e ingresos hospitalarios. En definitiva, para que se resuelvan sus problemas y necesidades sociosanitarias de manera efectiva que mejore su Bienestar y Calidad de Vida.

El envejecimiento no es ni debe ser un problema; sino un reto asistencial y social dado que se asocia a enfermedades crónicas, fragilidad, discapacidad y dependencia y, en mi opinión, sino se aborda con estrategias de poblacionales y con trabajo en equipos interdisciplinares puede llegar a constituir una verdadera amenaza para la SOStenibilidad del SNS.

JAMCA

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