Salamanca reconocerá la trayectoria de la presidenta de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer, Magdalena Hernández Mediero; la profesora Feli Cañada y la empresaria Francisca Rodríguez Martín
Mujeres que son un ejemplo y cuya labor, en cada de sus ámbitos, ha dejado una huella. Un merecido reconocimiento para dar visibilidad al empuje, iniciativa y trabajo de mujeres que han sabido convertir los obstáculos en oportunidades. Es el homenaje a tres salmantinas, en un acto que tendrá lugar el 8 de marzo en el Teatro Liceo (19.30 horas), la presidenta de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer, Magdalena Hernández Mediero; la profesora Feli Cañada y la empresaria Francisca Rodríguez Martín.
Feli Cañada, profesora de indumentaria charra
"Mi mayor satisfacción es seguir enseñando"
"Mi mayor satisfacción ha sido trabajar en algo que me gusta y seguir enseñando con los años que tengo". Más de de 40 años transmitiendo el oficio de indumentarista con el firme propósito de dejar este legado a las generaciones venideras. Por su taller han pasado cientos de alumnos, "he tenido alumnos de Alemania, de Japón, de Suiza...", a los que ha guiado en el cuidadoso trabajo de los trajes charros, un compendio de tradición y cultura. "Riqueza" del traje charro, como asegura Feli Cañada, para "poder tener el mejor museo del tejido".
Feli Cañada comenzó desde muy joven a coser y restaurar trajes charros, siendo a partir de 1960 cuando se inició en la restauración de otros trajes charros de museos como, por ejemplo, el expuesto hasta hoy en día en el Museo del Traje en Nueva York. Toda una vida dedicada a la investigación y comunicación del Traje Charro dentro de nuestro folklore, siendo además socia fundadora de la Ofrenda Floral a la patrona la Virgen de la Vega, acto que organiza la Asociación del Traje Charro. Recientemente ha recibido el Premio Honorifico nacional a la moda Prenamo por su trayectoria.
Magdalena Hernández, presidenta Asociación Alzheimer
"Nos ha tocado batallar con todo"
En 1988 el Alzheimer era un gran desconocido. Pacientes y familiares estaban "completamente desprotegidos y desinformados", y la lucha que emprendió Magdalena Hernández Mediero, fundadora de la primera Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer en Salamanca y promotora de la Asociación de Familiares de Alzheimer de España, fue la de "apoyar al enfermo, sea en el centro o en casa, porque sino difícilmente vamos a apoyar a la familia".
"Nos ha tocado batallar con todo", reconoce. El esfuerzo y dedicación se ha traducido en el impulso a proyectos y servicios de atención a las personas con Alzheimer, como la puesta en marcha del centro residencia Boni Mediero, en el año 2000. El trabajo de la Asociación, que reúne a más de 5.000 socios, sigue adelante con nuevos proyectos, como "ampliar la zona de estancia de las familias, acondicionar el centro de día" o impulsar el proyecto de las zonas rurales. Merecido reconocimiento que dedica "a mi familia, a mi madre que me impulsó a meterme en esta batalla, a mis hijas, a las personas que me han apoyado, al Ayuntamiento y a mi ciudad, que siempre han respondido". Recientemente ha recibido el Premio Especial de Cruz Roja a la solidaridad.
Francisca Rodríguez Martín 'Paquita'
"Siempre me he sentido muy valorada"
"Las mujeres de mi generación tuvimos menos oportunidades, y me siento muy contenta porque con este reconocimiento se está homenajeando a muchas mujeres". Mujer emprendedora en el ámbito de la cocina, asegura que "a la suerte le debo el tener una salud de hierro para trabajar", porque los logros son resultado de "mucho esfuerzo y trabajo", "y las mujeres de nuestra época tuvimos que ir aprendiendo de los errores". A sus 84 años recién cumplidos, asegura que "lo importante para salir adelante es no acobardarse y aprender de los errores".
Junto a su marido, en 1986, montó una tienda de comida preparada, la primera de este tipo en Castilla y León y la cuarta en España. Siempre ha tenido tiempo para enseñar y compartir sus conocimientos especialmente a otras mujeres. Además ha realizado múltiples cursos de cocina con fines benéficos para asociaciones de amas de casa, vecinales y culturales de Salamanca. Por su cocina han pasado reyes, jefes de estado, rectores, premios Nobel y estrellas de la música, entre otros. No ha sido el único logro, porque aunque no ha sido fácil también consiguió compatibilizar su trabajo con el de esposa, madre de cuatro hijos y abuela de seis nietos y un bisnieto.