Abrió sus puertas en septiembre y se ha convertido en lugar de encuentro para la comunidad 'maker'
Desde que abrió sus puertas el pasado mes de septiembre, FABLAB Salamanca ha dado forma a ideas de lo más dispares: desde cortapastas con formas muy personales para pequeños emprendedores que se dedican a la repostería creativa, a un maletín terapéutico, ideado por un grupo de profesores para trabajar con niños hospitalizados, pasando por las llaves en impresión 3D de una dulzaina, para un luthier de viento con el objetivo de fabricar este instrumento en versión 'low cost', o recambios para maquinaria que ya no se fabrican. Casi todos ellos tenían algo en común: ninguna noción de diseño ni del manejo de nuevas tecnologías pero con buenas ideas.
Los FABLAB se definen como "espacios en los que fabricar (casi) de todo". No son una franquicia, sino una red mundial de laboratorios de fabricación con identidad individual, pero que se identifican con una serie de valores y un inventario común (impresoras 3D, plotters de corte, cortadoras láser...) en los que las ideas pueden tomar forma y hacerse realidad.
Estos espacios de pura creatividad para la innovación, abiertos al público común, nacieron con la idea de democratizar la tecnología, favorecer su accesibilidad, y llenar ese vacío que existe entre que a uno se le enciende la bombilla y hace tangible su idea, facilitando un lugar donde experimentar y desarrollarla.
Situado en el Barrio del Oeste (calle Isidro Segovia, número 13), FABLAB Salamanca nació de la iniciativa de Silvia Cornejo Martín y Álex López Durán, dos emprendedores que veían como estos espacios cobraban cada vez más importancia en otras ciudades, y como, en localidades no demasiado industrializadas, eran una buena opción para la innovación, la investigación, el desarrollo y la educación.
Variedad de talleres
Estos particulares talleres no sólo se encargan de poner al alcance del ciudadano común nuevas tecnologías, sino de formarle en su manejo facilitando su autonomía. Con talleres de robótica, electrónica, fabricación digital, Arduíno, programación, impresión 3D o manualidades y scrap, que van de los 3 a los 99 años, pretenden ser un lugar de encuentro para la comunidad 'maker' de Salamanca y todo aquel que comparta la filosofía del "hazlo tú mismo" o "hazlo con otros".
Sus creadores fueron conscientes desde el primer momento de la dificultad que suponía romper esa barrera generalmente extendida de "las nuevas tecnologías no son para mí". "Nos costaba mucho dar a entender en qué consistía nuestro proyecto, a pesar de que en nuestro país algunos FABLAB ya llevan mucho tiempo funcionando. Los técnicos del Ayuntamiento no se ponían de acuerdo sobre el tipo de licencia o la reforma que teníamos que hacer en el local. De ahí surgió la idea de darle a nuestro FABLAB un aspecto más hogareño y acogedor y menos industrial que otros que puedes encontrar en España", aseguran los responsables, quienes durante estos meses se han esforzado en "quitar ese halo ciencio-futurista que muchas veces rodea a las nuevas tecnologías y en mostrar a la gente de a pie cómo les podían ser útiles".
El propio local es un muestrario de la filosofía "háztelo tu mismo" que trata de fomentar. "La falta de medios hemos trato de suplirla con creatividad; parte de la reforma, mobiliario, decoración e incluso maquinaria, la hemos hecho nosotros mismos", explican. Un local en el que, además de poder asistir a talleres formativos, es posible el alquiler de la maquinaria e incluso de una sala polivalente donde cualquiera pueda compartir su conocimiento.
Como ya sucede en otras ciudades del mundo, FABLAB Salamanca espera convertirse en un lugar de encuentro para relacionarse, colaborar, compartir ideas, proyectos (de todos los tamaños), conocimiento y técnicas, para generar impactos positivos ambientales, sociales o incluso ayudar a crear nuevas formas de pensar en nuestro mundo.
Y es que, como decía un sabio hace tiempo, "la creatividad es la inteligencia divirtiéndose".
Página web: www.fablabsalamanca.org
Teléfono: 611 434246