Todo aquí está afirmando una vida plena: las piedras, con su belleza dorada, y esas parejas que contemplan el arte, marcado por la luz
Espacio conseguido de belleza. Ámbito protector, donde el arte permite el abrazo amoroso y la contemplación de aquello que persiste por encima del tiempo. Como también ocurre cuando amamos, como dijera Rilke, pues estamos
de espaldas a la muerte. Todo aquí está afirmando una vida plena: las piedras, con su belleza dorada, y esas parejas que contemplan el arte, marcado por la luz. En la noche dorada, en la belleza plena, en la vida de veras compartida... está lo verdadero, lo que más nos importa. (Texto: José Luis Puerto. Fotografía: Carlos Santiago)