El legendario bar de las cuatro calles situado bajo los soportales de la Plaza vitigudinense tuvo como primeros propietarios al señor Pedro Puente y la señora Julia
Estos días se está llevando a cabo el derribo del mítico bar El Pavo de Vitigudino, después El Junco para sumar más de 100 años de historia bajo los soportales de la Plaza de España o las cuatro calles, como se conoce a este cruce de caminos entre Salamanca, La Ramajería, Las Arribes y El Abadengo.
Según algunas fuentes, los primeros propietarios que se recuerdan de este legendario establecimiento fueron el señor Pedro Puente y la señora Julia, los cuales también tenían una pequeña fábrica de caramelos en la calle Costanilla (calle de la cárcel) que vendían en el bar. Más tarde se encargaría de regentarlo el famoso Kike Pavo y sus hermanas durante años.
Por último y quizás el más conocido por ser más reciente es El Junco, en manos durante más de 25 años de Afrodisio Vicente, que también hizo de este lugar un rincón muy especial.
Silvestre González