Desconoce "El topillo" con cuántos afiliados contaba Ciudadanos en la provincia de Segovia, pero el dato confirmado es que hoy dispone de 14 menos de los que tenia registrados ayer. Ese es el número de los que han anunciaron su baja disconformes con la línea política del partido, así como con la falta de democracia interna.
Entre los abandonos destaca el de la única representante de Ciudadanos en la Diputación provincial, María Cuesta, quien piensa que, a raíz de su último congreso nacional, el partido cambió su ideario y ha dejado de lado su compromiso con el medio rural. Con Cuesta, han presentado la baja otros tres concejales del ayuntamiento de Espirdo y el único concejal del partido en El Espinar.
Junto a estos cinco cargos públicos, que piensan mantenerse en sus puestos en calidad de "no adscritos", abandonan la militancia otros nueve afiliados de base, varios de los cuales se encontraban expedientados por sus críticas a la dirección.
Este abandono en bloque se suma a un goteo de bajas individuales que no ha cesado desde que se constituyó el partido. Entre ellas figuran la deJuan Alcalde, uno de los concejales electos en el ayuntamiento de la capital, y la de Francisco Javier Rodríguez Recio, quien encabezó tanto la lista a las elecciones autonómicas de 2015 como la candidatura al Congreso de los Diputados en las generales de diciembre del mismo año.
Ciudadanos ha apelado a la "carta ética" firmada por todos los cargos electos para que Cuesta entregue al partido sus actas de concejal y diputada provincial. De no ser así, que va a ser que no, la formación naranja se quedará sin representación en la Diputación de Segovia, del mismo modo que el pasado año perdió la que tenía en Soria.
En el caso de Soria fue el propio partido el que expulsó a sus dos diputados provinciales, José Antonio de Miguel y Jesús Lozano, por haber apoyado una moción conjunta de PP y PSOE en defensa de la supervivencia de las Diputaciones provinciales. Con ello Ciudadanos perdió de paso la alcaldía de Almazán, que ostenta De Miguel, al tiempo que varias decenas de concejales presentaron su baja en solidaridad con los expulsados.