El ternero en la imagen se amamanta y va a la vida plena, a través de las ubres de la madre. Maternidad y paraíso. Una experiencia primordial de todos los mamíferos que llegan a la luz. Todo aquí es apacible. La hierba de los montes, las flores amarilla
El ternero en la imagen se amamanta y va a la vida plena, a través de las ubres de la madre. Maternidad y paraíso. Una experiencia primordial de todos los mamíferos que llegan a la luz. Todo aquí es apacible. La hierba de los montes, las flores amarillas, las encinas calladas... y hasta esos arbustos junto a las paredes, pese a no comprenderlo, pues no tienen conciencia, acompañan la dicha del ternero. Y la quietud es comun
ión de todo lo creado. Maternidad y paraíso.
José Luis Puerto (Texto) / Rosa Gómez (Fotografía)