OPINIóN
Actualizado 23/03/2017
Martín Gil

"Abogamos por un desarrollo personal holístico", dijo el director técnico de la Federación Alemana de Fútbol, Ulf Schott, el 13 de enero de 2015 en Estoril (Congreso "Footballa Talks"). Además amplió: "Queremos que todos los jugadores adquieran su autoestima en el fútbol, que tengan apoyo en la familia. Hay que preparar a los jugadores desde jóvenes para que tengan bases para lidiar con el fracaso". Concretó que se observan a unos 600.000 jugadores alemanes anualmente. (1.300 entrenadores en régimen parcial en 366 bases regionales de la Federación, un entrenador se encarga de unos 20 clubes del fútbol base). "Se debe ofrecer un trato individual, ver cuáles son los puntos más fuertes de cada talento, eso marca la diferencia". Noticia, por otra parte, que pasó bastante desapercibida?


¿Se puede traducir "holismo" por "totalidad"? Actualmente se citan con frecuencia aspectos del "fútbol globalizado"; o el "fútbol integrado"; o la "periodización táctica" del portugués Vito Frade; o el "fútbol contextualizado" de Mourinho, alumno aventajado de Frade; etcétera. Vaya por delante que el pensamiento "holístico" se encuentra en oposición al pensamiento "individualista" y aquel tiende a explicar el todo (la globalidad) a partir de sus partes? El mejor entrenador de baloncesto, Phil Jackson, obtuvo 11 anillos NBA con sus ideas en defensa del "sinergismo" entre las partes y contrario al encumbramiento del "individualismo". Curioso que el principio general del "holismo" lo resumiera de forma concisa Aristóteles: "El todo es mayor que la suma de sus partes". ¿Una tercera vía en estos enfoques? Quizás sea un abuso del lenguaje pero se habla de "holismo ontológico"; "metodológico"; "semántico"; "filosófico"; "de las ciencias humanas y sociales"; "emergentista"; pero la cuestión centrar el tema para el fútbol, para sus equipos, para sus jugadores, para sus gentes sin caer en charlatanería

¿Y todo eso para qué si un buen día en Mallorca, en un partido de niños, varios padres se dedican a maltratarse de palabra y obra, siendo la vergüenza nacional del fútbol? Sencillamente el fútbol precisa de una educación previa de la persona, saber ganar, saber perder, respetar, aceptar que el contrario puede ser mejor que tú un determinado partido, etcétera. Curiosamente, uno de los equipos en pugna el otro día ha decidido retirarse de la competición y jugar partidos amistosos para evitar las tensiones del resultado. Una salida "airosa" que no conduce a resolver el problema de fondo, todavía hay quien presume "no me gusta perder ni a las chapas?" Gustar, gustar, no le gusta a nadie pero hay que educarse racionalmente porque unas veces se gana y otras se pierde. Ser competitivo no está reñido con la educación, con el "fair play", con el respeto al otro. Si en el deporte no se transige, ¿cómo se va a ser tolerante en asuntos más importantes de la vida?. Vayamos hacia un "desarrollo personal holístico" en la familia, en la escuela, en la comunidad de vecinos, en el barrio, en el fútbol de la calle, etcétera. De lo contrario, sería una guerra perdida?

Salamanca, 22.marzo.2017

Leer comentarios
  1. >SALAMANCArtv AL DÍA - Noticias de Salamanca
  2. >Opinión
  3. >Fútbol holístico.