Poetas de Portugal, Ghana, Croacia, Chile, Japón, India y Puerto Rico, antologados por A. P. Alencart, colaborador de SALAMANCArtv AL DÍA
Es constante la repercusión que está teniendo la antología 'No Resignación (Poetas del mundo por la no violencia contra la mujer)', también conocida como 'Antología de Salamanca'. Se publicó el pasado mes de noviembre bajo el sello del Ayuntamiento de Salamanca, y contiene los textos de 136 poetas de cinco continentes. Entre ellos están los siete poetas que hoy presentamos: Albano Martins (Portugal), Kwame Dawes (Ghana), Tomislav Marijan Bilosnic (Croacia), Juan Antonio Massone (Chile), Hiroshi Tomita (Japón), Mainak Adak (India) y Jonatán Reyes (Puerto Rico).
ALBANO MARTINS
(Portugal)
AQUÍ SE DICE "¡BUENOS DÍAS!"
Se llega a casa y se dice: aquí
están anclados el amor
y la alegría, aquí
vive la risa. Aquí
se dice: "¡Buenos días!" Esta
es nuestra casa. En ella
los amigos viven
cogidos de las manos, los pájaros
hacen nido. Aquí
las golondrinas no empollan
los huevos de la violencia,
el desamparo,
el dolor.
Traducción de Alfredo Pérez Alencart
KWAME DAWES
(Ghana)
SI LA CONOCES
Si conoces a tu mujer, conoces sus ritmos,
conoces sus maneras; si le has prestado atención
todos estos años, sabrás
cómo ella va y viene, cómo se desliza
lejos incluso si está parada en
el mismo lugar, sabrás que su
mundo está suavemente derivándose de ti, y que ella
quizás no lo haga intencionadamente, porque lo que pasa
es que está asustada de ser todo, asustada
de encontrarse a ella misma en ti siempre
asustada de que un día se pregunte,
con sus plenos y propios cuarenta años, dónde
ha estado; si conoces a tu mujer,
sabrás que casi siempre ella
volverá, pero algunas veces, cuando
se va así, algo puede hacerla
resbalar; y entonces regresar es difícil.
Si conoces a tu mujer, puedes
saberlo por la forma en que usa tacones,
y no se contonea para ti
porque no lo hace por ti ? cómo
se comprará unas botas de cuero
sin decirte una palabra al respecto,
y sólo lo notas cuando camina
en una noche, y ella dice que las tiene
desde siempre, verás la forma
en que pierde peso y pretende
que no es nada, pero cuando ella no te está viendo
mirarla, puedes ver cómo enfrenta al espejo
levanta su busto para señalar un perfil,
y cómo casualmente se mira
el trasero buscando signos vitales. Si conoces
a tu mujer, cuando te hayas ido, ella
encontrará cosas que hacer, como caminar
sola, ir a ver una película, encontrar un parque,
recolectar sus secretos y tu no sabrás,
porque ella está viendo por sí misma.
Y ella no te dirá que quiere
escuchar lo que los hombres paseantes dicen cuando
ella camina cerca de ellos; porque lo que tú dices
no es suficiente. Si conoces a tu
mujer, sabes cuándo se está yendo
lejos y sentirás el amplio
agujero de tu amor, y no puedes
explicar por qué ella escucha y tararea
canciones que no sabías que escuchaba
antes, y ella reirá suavemente
por nada. Si conoces a tu
mujer, verás como ella va
y viene, y todo lo que puedes hacer es esperar
y rezar para que ella vuelva a ti,
porque sabes que tus pecados
son suficiente para que ella te deje y no vuelva.
(Versión de Gustavo Osorio de Ita)
TOMISLAV MARIJAN BILOSNIĆ
(Croacia)
LAS VÍRGENES CRUCIFICADAS
Mujeres vendidas como petróleo
oferta de muchachas, bienes inmuebles
en fotoshop e internet
Yacen las mujeres desnudas
caras vacías en el escenario
en el catre un corazón forjado
en el yunque de la noche
Las mujeres ejercen su oficio
recogiendo flores entre los látigos;
Las violaron,
llenaron sus panzas con sangre y plomo.
Las vírgenes de Vukovar
Las vírgenes de Srebrenica
con los dolores de los siglos
con el miedo a las palabras, oídos y ojos
En los bordados dorados de Occidente
como cuervos negros
crucificadas
las vírgenes africanas
En los cálices de marfil el sudor
de las vírgenes de India
las cunas de las niñas regadas con la semilla
de cobra
Mil y una noche de miedo
de las vírgenes en Arabia
en Afganistán
de temor entre las paredes
que les arrancarán el corazón
Las mujeres cuyos ojos
nunca verán la estrella del amanecer
las mujeres que desaparecen en el bochorno del verano
entre las sombras
Traducción de ?eljka Lovrenčić
JUAN ANTONIO MASSONE
(Chile)
CÓMO DEJARTE IR SI QUIERO AMARTE
Siempre podríamos ser felices.
Bastaría alzar el ánimo en la piel
para asirnos de una música ondulante
a la hora precisa de los ángeles,
cuando los álamos esparcen
alta sombra verde en los caminos.
Entonces seríamos tan felices.
No habría que ir más lejos
como quien buscara palabras
y regresara con las sienes vacías.
No contar más que con el pan,
el sonriente tenedor y una mesa
al comienzo, dijimos hace tan poco,
aunque el dolor nos codiciara suyos.
Besar en ti cielo y tierra, sólo por ser tú
y del instante extender el sueño,
la sensata promesa de confiarnos
el amanecer, los párpados del tiempo.
Vamos, mujer, de camino en el abrazo,
respirando exactamente indescifrables,
por la única razón de azular la espera,
por el único motivo de encontrarse,
por la sencilla razón de ser nosotros.
HIROSHI TOMITA
(Japón)
ANTES DEL DAÑO
Que no se desangre el amor
en la sombra,
en la niebla.
Que nadie sienta la dentellada.
Mejor que los dos
aprendan a partir antes del daño,
señal y culpa de la infamia.
Traducción de Noriko Takemitsu
y Javier González Godoy
MAINAK ADAK
(India)
INMERSIÓN
La cadencia de la flauta se difundía por todas partes.
La muchacha pensaba
que era mejor rendirse a la profundidad de la música
que vaciarse en cada noche.
Irá al cielo luminoso de la melodía dejando la boda muerta.
Una noche dejó la casa
Caminó hacia lo lejano---- hacia el estuario de la melodía
No sabía que el miedo imperaba en la esquina de la calle----
Las manos invisibles del arrozal le tiraron,
rasgaron su ropa.
Había sofocos.
Le perforaron las risas como las flechas-----
Pensaba que era una pesadilla,
pues corrió hacia el brazo del río.
La ligadura de la melodía quemó su cuerpo
y cuando liberó la canoa,
de repente las lanzas perforaron
su cuerpo desnudo.
Flotó su cadáver violado
dejando un lazo rasgado en su garganta
Hoy viene otra muchacha a su casa
Se oye nuevamente la cadencia de la flauta
Esta muchacha también se despista y deja la casa...
(Traducción desde el bengalí por el propio autor)
JONATÁN REYES
(Puerto Rico)
EN LA VÍSPERA DE TODAS LAS DIOSAS
Hay dolores que duelen más allá de la realidad.
Que desorganizan el espíritu, y disuelven el corazón
como una rosa líquida enferma de tanta espina?
Ese dolor taciturno que puede simular felicidad, abyecto,
es un crepúsculo escandaloso cayendo hasta golpearse
con el adoquinado, vertiendo todas sus naranjas;
es un estado alienígena y deforme, tullido
como la flor de la razón eclosionando en la sangre;
ese abismal lamento, esa crucifixión involuntaria
no es de cielo y no es de tierra, elaborado por el ser
primitivo y terrorista que aún habita nuestro hemisferio,
alterando el elemento más sustancial: "La mujer".
Y hasta que la percepción no evolucione,
y abandonemos en seco la cobardía y con piedad
el alma sincronice y trascienda, el mundo seguirá
gimiendo todos sus matorrales erguirse hasta la condena,
ondeando la cabellera de la injusticia a los cuatro vientos,
aullando toda la sensibilidad esfumarse, los labios
contorsionando el grito para reprimir el beso,
y perderse tras la cordillera de los besos infames,
mas como diosa "la mujer" omnipresente ser de oleaje
se elevará, y ha de ser -la intocable y la impredecible-
tras la niebla eléctrica, la única que altere
el curso del tiempo y el espacio.
¡Oh, mujer! Me confundo entre tu piel y tus amarguras,
a todo tu júbilo, seré esclavo; la sombra enroscada
en tus tinieblas desenredando los soles en tu pelo felino.
Ya que, mujer, ¡eres vida reproduciendo vida,
la verdadera poesía!