Cuando las flores quedan solas
por las noches cantan.
al terminar la vida, se abre una puerta
y por ella pasa el no olvido.
Sobre la tierra, de improviso,
en el rincón de los sueños helados,
tú te apareces y entonces me detengo.
Pongo mi soledad en la orilla de la ventana
te escribo este poema que llegará a ti,
como el frío de la noche helada.
Duermo bajo la música de la lluvia.
y siento el dolor incardinado en el corazón.
Y ese agujero cotidiano entre las sienes.
Un ruido a medianoche me recuerda tu corazón ,
luego en la mañana
las flores desparraman su aroma alrededor del jardín.
y el recuerdo se hace
un ramo de Hortensias de color blanco-lila, y rosas.
con forma de corazón
y te haces sonrisa en la tristeza
lágrima sobre la alegría
porque siempre, renaces con ellas .....
al terminar la vida, se abre una puerta
y por ella pasan el no olvido, los recuerdos