Amparo, sí, en tu desamparo.
En tu abandono voluntario,
cuando te pareció que la voluntad
del Padre callaba demasiado,
largo su silencio,
estrecha su puerta?
Amparo, entonces, en tu desamparo.
Oraste con el salmo,
asumiste el desprecio
en la hora última,
hiriente la burla,
sangriento el escarnio?
Amparo, siempre, en tu desamparo.
Como el que ha sido sacado
del vientre de la madre,
como el que siente la amenaza
tan cerca que muere,
derretido el corazón,
seca la garganta?
Amparo, ahora, aquí, para mí,
en tu desamparo.
Promesa de alabanza
para la fuerza tuya,
para la fuerza nuestra
en medio del mundo,
no más fortaleza que tu desamparo,
no otro amparo sino Tú?
Oración con el Salmo 22 (21). El Cristo del Amparo, de la Parroquia del Carmen, vuelve hoy a las calles salmantinas con motivo del Vía Crucis que convoca la Junta de Semana Santa en su 75º aniversario. Tuvo cofradía de sanitarios que visitaban con la imagen del Crucificado los hospitales de la ciudad cada Miércoles Santo. Fotografía de www.semanasantasa.com