OPINIóN
Actualizado 27/02/2017
Redacción

El secretario del PSOE en Castilla y León, Luis Tudanca, estaba en deuda con Patxi López. El motivo es que Tudanca fue uno de los cinco barones autonómicos que animaron al ex lehendakari a lanzarse a la piscina de las primarias socialistas. Junto a Tudanca, compusieron dicho quinteto el riojano César Luena, la balear Francina Armengol, la madrileña Sara Hernández y, por descontado, la vasca Idoia Mendía. Se pensaba entonces que el paso al frente de López iba a desanimar a Pedro Sánchez, al que dichas baronías habían guardado fidelidad justo hasta ese momento. Después, el ex secretario general ha resurgido de sus cenizas y ha vuelto a cambiar el cuento.

Ayer Patxi presentaba su candidatura en Burgos y Tudanca estaba moralmente obligado a apoyarle al máximo. No bastaba simplemente con asistir al acto, como hizo la semana anterior al de Pedro Sánchez y hará sin duda -por aquello de mantener su teórica neutralidad- el día que Susana Díaz aparezca por Castilla y León cuando se incorpore oficialmente a la carrera por la secretaria general. Tudanca no podía dejar que López pasara por Burgos como alma en pena y movilizó al aparato provincial del partido para arropar al diputado vasco.

Sin que fuera un acto multitudinario, en el Real Monasterio de San Agustín se congregó la suficiente parroquia para que el ex lehendakari salvara la imagen en los telediarios. Además de la plana mayor del partido en Burgos, también se acercaron algunos miembros de la Ejecutiva Autonómica, como la secretaria de Organización, la zamorana Ana Sánchez, y la de Política Municipal, la soriana Virginia Barcones.

Ni estuvo, ni se le esperaba, el máximo representante del susanismo en Burgos, Chema Jiménez, ex secretario provincial del PSOE. Tampoco se dejó caer el ex secretario autonómico del partido y senador por la comunidad, Óscar López, comprometido públicamente -al menos por el momento- con la candidatura del socialista vasco.

Patxi López procuró mantener cierta equidistancia frente a las opciones de Pedro Sánchez y Susana Díaz. Aunque la destinataria de su dardo más directo fue sin duda la baronesa andaluza. No otra cosa es afirmar que el PSOE no puede permitirse un secretario o una secretaria general "a media jornada" porque necesita a alguien que se ocupe del cargo "25 horas al día". Algo que, salvo que disponga del don de la bilocación, difícilmente podría hacer la presidenta de la Junta de Andalucía?

Leer comentarios
  1. >SALAMANCArtv AL DÍA - Noticias de Salamanca
  2. >Opinión
  3. >Tudanca salda su deuda con Patxi