CERECEDA DE LA SIERRA | Los vecinos disfrutaron de la tradicional fiesta local con la música del conocido tamborilero
Cereceda de la Sierra se vistió de fiesta en el día de ayer para celebrar San Pablo Ermitaño. Los vecinos se dieron cita en la iglesia parroquial donde se celebró una misa serrana con presencia del tamborilero Ángel
Rufino de Haro, El Mariquelo, quien animó la jornada con la música de su gaita y tamboril. Tras el oficio religioso se trasladó la imagen de San Pablo al exterior del edificio y se celebró el tradicional ofertorio.