OPINIóN
Actualizado 26/12/2016
Redacción

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(?)

MARÍA.-

-Muchas gracias, pastorcillos,

Por venir desde tan lejos.

¿No tendréis un choricillo?...

¡Tengo un hambre que me muero!

(La pastorcilla le entrega un chorizo)

PASTOR 2.-

-Yo, para ti, San José,

la bota traigo conmigo;

está repleta de vino

por si, acaso, tienes sed.

(San José bebe un largo trago de la bota. Después lo paladea.)

-¡Oh!... ¡Qué vino tan exquisito!...

¡Voy a probarlo otra vez! (?)

(Continúa paladeando, deja de beber y queda pensativo)

Me la quedaré un ratito

por si vuelvo a tener sed.

(Se la cuelga al hombro.)

-Mas, decidnos, pastorcillos:

¿Qué otros presentes traéis?

PASTORA 6.-

-Yo le traigo unos patucos

a juego con el jersey.

PASTORA 3.-

-Yo, este muñeco de trapo,

por si quisiera jugar.

Por favor, que no lo chupe,

no se vaya a intoxicar.

PASTORA 1.-

-Yo, con todos mis ahorros,

le he comprado caramelos

con papel de colorines,

de la tienda, los más buenos.

PASTOR 2.-

-Dicen que el mejor regalo

que en el mundo puede haber,

es que se acaben las guerras

y todos puedan comer.

PASTORA 4.-

-Pues yo le traigo agua limpia,

por si lo queréis lavar.

Y no tiréis la garrafa,

pues se puede reciclar.

PASTORA 2.-

-Yo le traigo esta cobaya,

mi mascota preferida.

Cuidad que al Niño no muerda,

pues puede hacerle una herida.

PASTOR 3.-

-Yo, un libro de Gloria Fuertes

y, así, le podréis leer

las poesías más hermosas

y hasta las podrá aprender.

PASTORA 7.-

-Yo, un estuche de pinturas,

por si quiere colorear

las estrellitas del cielo.

Son de Alpino y duran más.

PASTOR 1.-

-Yo, zanahorias y puerros

y estas sopas de "AVECREM".

Si las tomáis calentitas,

a los tres sentarán bien.

(*) Texto -incompleto- perteneciente a la obra infantil de Teatro de Navidad, titulada: "Una estrella misteriosa", representada por alumnos en escenarios de las localidades salmantinas de Cipérez y Valdecarros.

VILLANCICO

EN BELÉN SE HIZO DE NOCHE

En Belén se hizo de noche

y en el cielo apareció

una estrella misteriosa

que anunciaba al Niño Dios.

¡Arre mulita!... ¡Arre mula!...

(azuzaba San José),

que lleguemos al pesebre

que el Niño nos va a nacer.

La Virgen, que iba en la mula,

miraba hacia San José;

sus ojos eran brillantes

y anacarada su piel.

ESTRIBILLO:

Una, dos, dos, tres y cuatro,

cuatro, cinco, cinco y seis;

iban la mula y la vaca,

la Virgen y San José.

Y la estrella misteriosa

que anunciaba al Niño Dios,

se posó sobre el pesebre

y todo lo iluminó.

Al enterarse en el pueblo

todos le quisieron ver,

le cantaban villancicos,

le llevaban leche y miel.

ESTRIBILLO:

Una, dos, dos, tres y cuatro,

cuatro, cinco, cinco y seis;

iban la mula y la vaca,

la Virgen y San José.

Y el Niño Jesús, contento,

a todos le sonreía

durante toda la noche,

hasta que al fin vino el día.

ESTRIBILLO

Una, dos, dos, tres y cuatro,

cuatro, cinco, cinco y seis,

seis y siete, ocho y nueve:

¡A dormir, que son las diez!

¡A dormir, que son las diez!

Una, dos, dos, tres y cuatro,

cuatro, cinco, cinco y seis,

seis y siete, ocho y nueve:

¡A dormir, que son las diez!

® Textos: Carlos Blanco

© Ilustración: Nerina Canzi

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