BÉJAR | Habeas Corpus lanza acusaciones al Ayuntamiento sobre el derribo del cerramiento que los propietarios de El Tremedal están realizando en terrenos en conflicto por la delimitación de las lindes
Según comunicado de la Asociación Hábeas Corpus, los operarios que estaban trabajando en el cerramiento de la finca de El Tremedal en la Sierra de Béjar, enviados por los propietarios, se han encontrado con que los postes han sido arrancados y acusan al Alcalde de ser quien podría haber ordenado su retirada.
Para la asociación Hábeas Corpus, el cerramiento, que presumiblemente está haciendo el Ayuntamiento de Béjar, marca los límites de los términos municipales, no los de las fincas. La finca El Tremedal es una propiedad proindivisa de unos 80 propietarios, de la que al parecer algunos de ellos estarían dispuestos a poner estos hechos en conocimiento del Juzgado de Piedrahita, así como a presentar una denuncia por vandalismo ante la Guardia Civil de Barco de Ávila, cuando tengan identificadas a los autores de los hechos a través de las imágenes de una cámara instalada en esa zona a tal efecto.
El alcalde Alejo Riñones, ha señalado que es el Ayuntamiento de Béjar el que ha puesto una denuncia ante la Guardia Civil y el Juzgado por haber invadido los terrenos que no les corresponden colocando unas estacas de hierro, y además ha añadido que ha pedido al Instituto Geográfico Nacional, que se pronuncie en cuanto a las lindes, atendiendo a un acta del propio instituto firmada por los alcaldes Emiliano Barros de La Hoya, Domingo Álvarez de Navacarros, Ángel Calvo de Béjar y Eusebio Muñoz de Solana de Ávila, el día 29 de junio de 1983, en la que se establecía la línea de término y se señalaban los mojones comunes a los términos de Navacarros y Solana de Béjar (municipio ahora denominado Solana de Ávila), en el que se encuentra la finca de El Tremedal.
El Alcalde ha asegurado que el Ayuntamiento tan sólo ha marcado los puntos con señalizadores de color verde para que se vea bien claro donde están ubicados los mojones mencionados en el acta, y añade que quienes quieran ver donde están las lindes tan sólo tiene que tirar una cuerda de uno a otro de dichos mojones porque las de las fincas coinciden con las de los términos municipales, hecho que se demuestra con la autorización otorgada el 11 de febrero de 1999 por el Alcalde de Navacarros de entonces, Antonio Caldera, para poner la pilona objeto de la controversia en su término municipal.
Las discrepancias de lindes se han producido desde que la Covatilla ha dejado de ser gestionada por Gecobesa, y el propio Alcalde ha manifestado en varias ocasiones que se trata de temas indefendibles detrás de los que están algunos miembros de la antigua gestora, por eso considera que no va a perder más tiempo en responder a sus insinuaciones y expresándose de manera muy gráfica ha dicho "a palabras necias oídos sordos".