Invito a cada cristiano, en cualquier lugar y situación en que se encuentre, a renovar ahora mismo su encuentro personal con Jesucristo o, al menos, a tomar la decisión de dejarse encontrar por Él, de intentarlo cada día sin descanso. No hay razón para que alguien piense que esta invitación no es para él, porque «nadie queda excluido de la alegría reportada por el Señor». Al que arriesga, el Señor no lo defrauda, y cuando alguien da un pequeño paso hacia Jesús, descubre que Él ya esperaba su llegada con los brazos abiertos (Papa Francisco en Evangelii Gaudium).
A esta invitación, hecha a todos y cada uno, ha querido responder la Iglesia local de Salamanca con la Asamblea Diocesana, cuyas sesiones finales acaban de inaugurarse. El 8 de septiembre de 2014 era convocada en la Catedral por el obispo, ante la imagen de Santa María de la Vega, y el 8 de octubre de 2016 culminará junto a Nuestra Señora de la Peña de Francia en su santuario jubilar de la Misericordia.
La invitación personal se ha respaldado con una llamada a todas las comunidades de la Diócesis para que redescubran la alegría de saberse comunidades de Jesús, fundadas en el encuentro con Él, edificadas sobre su Evangelio, puestas en medio del mundo para llevar la alegría de su Vida resucitada. Durante dos años, sencillamente, hilvanando momentos y entretejiendo encuentros, se ha puesto el corazón en suerte para un novedoso enamoramiento. Cada cual lo habrá percibido a su manera, oculta a los ojos que miran sin ver.
Una parábola de alegría al rezar tantas veces con esa tarjetita de la oración, desde el "Dios, Padre lleno de bondad?" hasta el "Amén". Alegría al anunciar que estábamos en Asamblea, en ese burbujeo de colores grandes y pequeños que nunca pasarán al estado gaseoso porque tienen en el centro la Cruz. Alegría de la mesa en letra rosa, y de los grupos sentados en torno a doscientas mesas, y de las mesas de escucha y diálogo, y de la Mesa inmensa y eterna de la Eucaristía. Alegría de peregrinación y de misión. Alegría de silencio y de plegaria. "El Señor ha estado grande con nosotros y estamos alegres".
En la imagen, la Cruz de la Asamblea elaborada por Jesús López Martín, a su paso por el colegio de los Trinitarios (17 marzo 2016). Ha peregrinado por parroquias, santuarios, conventos, colegios, residencias y cofradías de toda la Diócesis.