Asegura que la apertura del procedimiento penal a una guardia civil no es porque la afectada utilice el chaleco particular
La Asociación Profesional Unión de Oficiales de la Guardia Civil en Salamanca insta a la Dirección General de la Guardia Civil a que dote de chalecos antibalas femeninos a los agentes y lamenta "el escarnio público injustificado en que se ha visto envuelto una oficial" y le muestra todo su apoyo.
Sobre la apertura del procedimiento penal a una compañera, la Unión de Oficiales de la Guardia Civil de Salamanca asegura que "no es porque la guardia civil afectada utilice el chaleco particular sino por no utilizar el chaleco antibalas oficial que tiene adjudicado en su unidad; desde hace más de un año se le ha ordenado que debe utilizar el chaleco oficial tanto desde la Dirección General de la Guardia Civil, como desde la Comandancia de la Guardia Civil de Salamanca y Oficina de Prevención de Riesgos Laborales, la última vez que se le comunicó por escrito esta obligación fue el mismo día de autos, antes de que surgiera el incumplimiento voluntario por parte de la guardia civil a la orden dada por el oficial responsable del control que ordena a todos los intervinientes el uso de los chalecos antibalas oficiales (se recuerda que estamos en el nivel 4 riesgo alto de protección antiterrorista) y al comprobar que no hacía uso del mismo es cuando se inician las actuaciones contra la guardia civil".
El delegado territorial de la asociación, Francisco Javier Pinto Almaraz, explica que "el oficial se limita simplemente a cumplir una orden superior y actuar en consecuencia ante una desobediencia clara, flagrante y deliberada en presencia de otros compañeros. Tampoco es cierto que el chaleco oficial que tiene asignado la compañera le impida el manejo del arma, hecho corroborado por el oficial informante y compañeros de la mencionada guardia civil".
Se hace constar, asimismo, que se desconoce si el chaleco particular de la agente cumple con los mismos requisitos de calidad sobre seguridad y eficacia exigidos a los chalecos antibalas oficiales adjudicados por la Guardia Civil, "quien sería entonces responsable de una posible desgracia por el uso del chaleco particular, el oficial que permitió su uso incumpliendo un mandato superior?".