OPINIóN
Actualizado 27/08/2016
Julio Fernández

Profesor de Derecho Penal de la Usal

El otoño que comenzará en un mes será una "patata caliente" para el PP, dado que comienzan algunos juicios muy relevantes sobre presuntos casos de corrupción en las filas de este partido: Gürtel y Bárcenas y tendrán que comparecer varios de los dirigentes históricos del PP excepto Rajoy: Cascos, Arenas, Acebes, Rato y Mayor Oreja. Arenas, por otro lado, sigue siendo actualmente vicesecretario del PP.

Es, además, muy probable que pueda también crearse en el Parlamento una comisión de investigación sobre la presunta financiación ilegal del PP y el pago de sobresueldos, ya que la inmensa mayoría del arco parlamentario está de acuerdo en esta medida.

Por otra parte, también comenzará el juicio por las tarjetas Black de Caja Madrid, en el que están imputados Rato y Blesa, además de antiguos consejeros propuestos por el PSOE e IU.

Igualmente está previsto que avancen los procesos penales sobre el caso Acuamed y el Púnica, éste último sobre la presunta trama de corrupción en el PP madrileño.

Ante este panorama, es lógico que en el PP anden muy nerviosos, tengan ganas de cerrar cuanto antes las negociaciones sobre un pacto para la investidura de PP con Ciudadanos y sigan intoxicando a la opinión pública con la información tendenciosa y partidista de responsabilizar al PSOE y resto de partidos de la oposición de ser los culpables de que pueda haber unas terceras elecciones generales en menos de un año. Aunque ante la opinión pública el PP diga que las negociaciones con Ciudadanos van bien, la verdad es que hay más discrepancias entre los dos partidos que puntos en común; por lo que no resultaría extraño que las negociaciones pudieran encallar. El PP no está dispuesto a que se despolitice la Justicia y en la lucha contra el fraude, tampoco está dispuesto a que se recupere todo el dinero perdido por la amnistía fiscal promovida por el gobierno de Rajoy, como ha solicitado Ciudadanos. El responsable directo de que los españoles tengamos que ir a votar el día de Navidad (si no se forma gobierno antes) es exclusivamente Rajoy, quién ha promovido las fechas del debate y votaciones para su posible investidura y que comenzarán el martes 30 de agosto.

Con independencia del fondo de las negociaciones entre ambos partidos, sorprende que Albert Rivera haya relajado tanto sus rígidas posturas iniciales, sobre todo en las relativas a la corrupción política. Todos escuchamos en la campaña electoral que dijo que no se sentaría a negociar con el PP si el candidato a la presidencia del gobierno era Rajoy, responsable político de los presuntos casos de corrupción que asolan al PP. Estoy convencido de que este lastre que pesa sobre el partido de Albert Rivera, le puede suponer un coste electoral muy elevado a Ciudadanos en una próxima confrontación electoral y ser absorbido por el PP. Es lógico pensar que si los votantes de Ciudadanos son, en su mayoría, electores desencantados con el PP, éstos no querrán que Ciudadanos apoye nuevamente a Rajoy para formar gobierno.

Por otro lado, en el equipo negociador del PP se han juntado varios líderes políticos sobre los que ha pesado mucho la sombra de la corrupción. Y los seguimos viendo en la foto diariamente. Por un lado las cámaras sacan constantemente las declaraciones que cada día realiza el vicesecretario de organización del PP, Martínez Maíllo, que fue presidente de la diputación de Zamora y en el momento que lo nombró Rajoy número 3 del PP estaba imputado por un presunto delito de Administración Desleal debido a que en 2009 era miembro del Consejo de Administración de Caja España, entidad que concedió irregularmente créditos al entonces presidente de la misma, Santos Llamas. Fátima Báñez, otro de los miembros del comité negociador del PP, dio plantón a la comisión de investigación creada en el Parlamento Andaluz para depurar responsabilidades políticas en el caso del fraude de los cursos de formación (el más conocido como de los ERE de Andalucía).

Esto, lejos de ser un ejemplo de transparencia, lo es de un partido enquistado en el oscurantismo que siempre ha presidido la corrupción política y de la que no sabe cómo salir. Pero estoy convencido de que, tarde o temprano, la justicia podrá a cada cuál en su sitio. Esperemos que sea pronto.

Etiquetas

Leer comentarios
  1. >SALAMANCArtv AL DÍA - Noticias de Salamanca
  2. >Opinión
  3. >Otoño caliente para el PP