PEÑARANDA | El acto, al que acudieron más de un centenar de personas, fue presentado por el Vicario General de la Diócesis, Florentino Gutiérrez, la alcaldesa Carmen Ávila y el párroco Lauren Sevillano
El Teatro Calderón acogía este viernes la presentación del proyecto que conformara el nuevo retablo para el presbiterio de la iglesia parroquial San Miguel Arcángel, obra del artista peñarandino Alejandro Mesonero, dentro de un sencillo acto que acaparaba la atención de un abarrotado patio de butacas.
Una presentación en la que el párroco de la ciudad, Lauren Sevillano, destacaba que este proyecto "debemos de sentirlo como algo propio, enamorarnos de el cada día ya que la mejor forma de vivir la fe y la catequesis es precisamente a través de imágenes como las que hoy se presentan".
"Uno de los caminos más importantes para llegar a Dios es el arte" señalaba el Vicario General de la Diócesis de Salamanca, Florentino Gutiérrez, quien se mostraba ilusionado por la iniciativa, incidiendo en que "me entusiasma, es un claro ejemplo de unión entre las administraciones civiles y religiosas".
Por su parte, el padre de este importante proyecto iconográfico, Alejandro Mesonero, agradecía de manera especial la colaboración de instituciones tanto civiles como religiosas, destacando con especial énfasis el recibido desde el consistorio y la primera edil, de los que afirma que "es una iniciativa del Ayuntamiento en su conjunto ya que son los que han despertado nuevamente esta idea, son los ilusionantes de ello" y afirmaba sentirse nervioso ante la responsabilidad adquirida ya que, tal y como afirmaba "es un compromiso ante mi pueblo además de jugarme mucho en lo artístico pero sobre todo en lo espiritual. Sin duda voy a dejar lo mejor de mí en este proyecto".
COMO SERA
La primera fase de este proyecto artístico contendrá lienzos a tamaño natural de los 12 apóstoles y diferentes representaciones como la Epifanía o la imagen de Jesús Resucitado, integrándose en ello tanto el sagrario como el crucificado actual.
TRÁMITES Y FINANCIACIÓN
Dividido en varias fases, la primera arrancara tras la redacción del convenio que el Ayuntamiento ya está preparando, en el que quedaran fijadas las diferentes posiciones y puntos de interés tales como los plazos definitivos de ejecución, la ubicación o la propiedad de toda la oba que se instalara en el altar mayor. Una vez realizado será firmado por las partes implicadas en ello y se dará luz verde a esta iniciativa.
La primera fase está presupuestada en 164.000 euros, que se harán efectivos mediante dos vías: la creación de una cuenta bancaria solidaria en la que puedan realizarse donativos para el proyecto, o mediante diferentes iniciativas promovidas desde el Ayuntamiento con el fin de recaudar fondos para conseguir reunir esta importante cantidad con la que ejecutar esta parte del proyecto. Se estima que esta primera fase podría estar finalizada en 2018, aunque aún se están estudiando los plazos de la misma.