El Brexit, esto es, la posible salida del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte de la Unión Europea, está cobrando un más que curioso protagonismo a medida que se acerca la fecha del referéndum que Reino Unido celebrará para esta cuestión, previsto para el 23 de junio, esto es, el jueves que viene.
Sin duda, los últimos días han venido marcados por la suspensión de la campaña por el asesinato de la diputada del Partido Laborista Jo Cox, tiroteada en Birstall, en la región histórica de Yorkshire, una zona bastante hostil a la permanencia en la UE y donde el euroescéptico UKIP (United Kingdom Independence Party) fue el más votado en las elecciones al Parlamento Europeo de 2014, poseyendo en esta región más pujanza que la media nacional otras opciones anti-UE como Independence of Europe, British National Party (BNP), English Democrats o No2EU.
Por otro lado, como consecuencia de dicho asesinato, el primer ministro británico, David Cameron, tuvo que cancelar el mitin que tenía previsto en Gibraltar, de manera que sus actos en el Peñón se redujeron a una reunión con el primer ministro gibraltareño, Fabián Picardo, tras la cual volvió a Gran Bretaña.
Sea como fuere, las encuestas salidas a la luz en las últimas fechas no dejan nada claro el panorama respecto a qué resultado puede darse. Parece que ahora mismo habría una ligera ventaja por parte de quienes desean abandonar la Unión Europea, pero la situación parece hallarse en unos escasos márgenes que permitirían hablar de empate técnico.
Encuestas sobre la permanencia/salida del Reino Unido de la UE (14-15 Junio)
| 14-Jun | 14-Jun | 15-Jun | 15-Jun | 15-Jun | 15-Jun | Media |
Ipsos Mori | Elections Etc | Number Cruncher Politics | Survation | Financial Times | What UK Thinks | ||
Permanencia | 43% | 50% | 44% | 42% | 44% | 48% | 45'2% |
Abandono | 49% | 50% | 47% | 45% | 47% | 52% | 48'3% |
Fuente: Elaboración propia (Carlos Javier Salgado)
En todo caso, resulta paradójico que, si observamos las encuestas, parece como si se le hubiese dado "la vuelta a la tortilla", pues hasta este mes la opción pro-UE partía con ventaja si sacamos la media mensual de todas las encuestas, aunque ha habido encuestas para todos los gustos. En este sentido, los sondeos de ICM han reflejado un mayor nivel de euroescepticismo, frente a las encuestas de ORB, cuyos sondeos telefónicos daban claras mayorías a la opción pro-UE hasta esta semana. Otras empresas demoscópicas, como YouGov o TNS, han ido dando la victoria alternativamente a una opción u otra.
Media mensual de encuestas sobre permanencia/abandono de la UE
| Enero | Febrero | Marzo | Abril | Mayo | Junio (Hasta el 15) |
Permanencia | 44'7% | 43'0% | 43'7% | 43'7% | 44'8% | 43'9% |
Abandono | 40'6% | 40'2% | 40'5% | 41'2% | 42'1% | 46'5% |
Indecisos | 14'5% | 16'8% | 14'7% | 13'9% | 11'9% | 8'3% |
Número de encuestas: Enero: 11, Febrero: 16, Marzo: 18, Abril: 25, Mayo: 23, Junio: 24
Fuente: Elaboración propia (Carlos Javier Salgado)
Este hecho no deja de recordar en cierto modo lo ocurrido con las encuestas sobre el referéndum de independencia de Escocia de septiembre de 2014, que hasta un mes antes del mismo rara era la encuesta que hacía llegar al 40% a la opción del sí (de hecho, hasta principios del propio septiembre TNS no le daba más del 32%, dejándola incluso por debajo del 30%). Finalmente, las empresas demoscópicas fueron "corrigiendo" los resultados de sus encuestas para acercarlas paulatinamente en el último mes hacia el resultado final, que fue del 45% para el sí y de un 55% para el no, rechazándose la independencia escocesa.
En este caso, parece que las encuestas están llevando el mismo camino y, si bien han otorgado un mayor apoyo a la opción del Brexit (en torno al 40%), en los últimos días los sondeos publicados están situando esta cifra muy cerca del 50%, hecho que se nos está vendiendo como una realineación de última hora de los británicos hacia su salida de la Unión Europea, pero que quizá no sea sino una manera más de corregir la tendencia de unas encuestas que no se correspondían con la realidad y que, quizá, buscaban más orientar la opinión que plasmarla.
En todo caso, desde las instancias pro-UE ya han sacado toda la artillería mediática para intentar atemorizar a la población británica de que si rechazan seguir en la Unión Europea ocurrirá poco menos que el apocalipsis. Y creo que no se puede obviar que este hecho tendría unas importantes consecuencias económicas, pero tampoco se van a abrir los océanos por ello como parecen vaticinar algunos.
Respecto a la posición de los partidos políticos, el Partido Conservador del primer ministro se ha declarado neutral, habiendo en el mismo posiciones tanto a favor de la UE, como la del propio David Cameron, como en contra, como la del exalcalde de Londres Boris Johnson. En cuanto al resto de principales partidos, a excepción del UKIP, éstos han rechazado oficialmente abandonar la UE. De esta manera, al Partido Laborista, el Partido Verde o los Liberal-Demócratas, se suman formaciones nacionalistas como el SNP escocés, el galés Plaid Cymru, o los norirlandeses Sinn Féin y SDLP. En cuanto a las posiciones pro-británicas en el Ulster, sus formaciones se hallan divididas, con TUV o DUP abogando por abandonar la UE, frente al UUP que apoya la permanencia.
De esta manera, a menos de una semana para el referéndum británico sobre la UE, nos encontramos con unos mercados atemorizados ante la posibilidad de que algo pueda cambiar el statu quo actual. Y quizá la salida del Reino Unido de la UE pueda acabar llevándose por delante a toda la estructura comunitaria, pues el euroescepticismo en países como Francia, Alemania, Austria o los países nórdicos es cada vez más mayoritario. En manos de los británicos está abrir el melón o dejarlo cerrado.