GUIJUELO | Cientos de personas disfrutaron de la exhibición del acróbata del motor en la calle Filiberto Villalobos
La novena concentración motera Pata Negra de Guijuelo vuelve a cumplir con las expectativas y llenó las calles de la villa de cientos de aficionados a las motos que están disfrutando de un agradable fin de semana. La recepción de los moteros comenzó a la una de la tarde en la plaza de Julián Coca, recibiéndose a miembros de clubes como Moteros Sin Prisa, Club Vespa de Salamanca o el de motos clásicas de la capital. No faltaron tampoco aficionados de Salamanca, Madrid, Béjar, Cáceres y otras localidades cercanas. A partir de las cinco y media de la tarde se disfrutó de la música de Pedro San Ricardo, de Music Factory, en el escenario musical ubicado en la plaza de Julián Coca.
El espectáculo se trasladó a partir de las siete y media a la calle Filiberto Villalobos. Primero, el público asistió a un pase infantil de minimotos a cargo de Raquel y Cayetana Sánchez, a continuación llegó el turno del punto álgido de la concentración, la actuación de Emilio Zamora, el conocido piloto y acróbata, que realizó todo tipo de juegos de equilibrio en varias motos y un quad. Destacaron el gran salto que hizo sobre varios voluntarios tendidos en el suelo y una acrobacia a una rueda sobre un círculo de fuego. El espectáculo fue seguido por cientos de vecinos, moteros y curiosos que vitorearon al artista.