Enormes trasiegos y bullicios dentro de las aguas, donde prolifera la lenteja de agua, los potamogetón, es decir las algas filamentosas de los aguazales y los verdines. Frezan tencas, alburnos, leuciscos y carpas, que repetirán dentro de dos meses. Ya nacen por millones los pequeños escarabajos y chinches de agua. Sobre la misma hay miles de abrazos de libélulas y caballitos del diablo, al tiempo que sus sucesores, las formas larvarias que llevaban de uno a cuatro años en el seno de las aguas, comienzan a remontar los tallos de los juncos, carrizos y espadañas y en el medio aéreo culminan una de las más imponentes metamorfosis. Hasta las sanguijuelas y los caracoles acuáticos están proyectándose hacia el futuro. Los alevines de trucha adquieren el aspecto de adultos y comienzan a devorar a los de otras especies, a renacuajos e insectos acuáticos.